El Gobierno lleva concedidos 19 millones a las asociaciones de víctimas del terrorismo

El Gobierno asignó en el Presupuesto para este año 19.105.431 de euros a repartir entre todas las asociaciones de víctimas del terrorismo. La máxima partida, casi 18 millones de euros, se destinó a indemnizaciones. La vicepresidenta primera del Gobierno, María Teresa Fernández de la Vega, calificó de "sorprendente" que la Asociación de Víctimas del Terrorismo (AVT) denuncie ahora no haber sido incluida entre las beneficiarias de las subvenciones procedentes del IRPF cuando fue Aznar quien en 2003 decidió ayudar a las víctimas con recursos de los Presupuestos del Estado.

La AVT, que se ha manifestado en numerosas ocasiones en contra la política antiterrorista del Gobierno, comenzó el pasado jueves un nuevo enfrentamiento con el Ejecutivo, en esta ocasión por las ayudas económicas que recibe. La asociación reprochó a Trabajo que le haya denegado una subvención procedente de la asignación que los españoles otorgan a "otros fines de interés social" en la declaración de la renta. Trabajo contestó que la AVT no tiene por qué competir con otras ONG por los fondos ya que dispone de una subvención directa en los Presupuestos del Estado. Además, explicó que su proyecto había obtenido una valoración negativa.

La vicepresidenta del Gobierno afirmó ayer, en la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros, que le parecía "sorprendente" que la AVT acuse ahora al Gobierno de no asignarle la subvención cuando fue el Ejecutivo de José María Aznar el que tomó la decisión de que las víctimas recibieran ayudas del Ministerio de Trabajo sin necesidad de presentar un proyecto, como tienen que hacer las demás ONG que optan a las subvenciones procedentes del IRPF.

"Se decidió en 2003 y es lo que estamos haciendo. Por eso, al Gobierno le sorprende que, ahora, la Asociación de Víctimas del Terrorismo critique una decisión que adoptó Aznar y que no se criticó cuando se adoptó", afirmó.

La vicepresidenta aseguró que no sólo no se discrimina a la AVT, sino que se le da un trato privilegiado. Ese trato de favor se tradujo en 2004 en 150.000 euros procedentes de los Presupuestos del Estado. Este año, esa cantidad se ha reducido a la mitad porque el Ejecutivo ha decidido repartir la partida entre la AVT y la Fundación Víctimas del Terrorismo, un colectivo en el que están presentes todas las asociaciones y fundaciones de víctimas. En concreto, cada una tiene asignado 76.050 euros.

Además, el Ministerio del Interior ha concedido a la AVT 120.200 euros, cofinanciados por el fondo social europeo. Este departamento también incluyó en los Presupuestos de 2005 unos 600.000 euros a repartir entre todos los colectivos de afectados por el terrorismo. La Fundación de Víctimas, por su parte, ha obtenido del Ministerio de Cultura 470.076 euros.

La mayor cuantía, 17.763.055 euros, ha estado destinada a indemnizaciones y compensaciones derivadas de la Ley de Solidaridad. En total, el Gobierno ha concedido a los distintos colectivos más de 19 millones de euros.

La AVT anunció que recurriría la decisión de Trabajo. Su presidente, Francisco José Alcaraz, afirmó que los servicios jurídicos de su organización están estudiando la forma de recurrirla ante el Ministerio de Trabajo o en la Sala de lo Contencioso-Administrativo de la Audiencia Nacional. Respecto a las declaraciones de De la Vega, Alcaraz aseguró que o tiene "un desconocimiento tremendo" o "intenta trasladar una información falsa y manipulada". En su opinión, Aznar no cambió el modelo de ayudas sino que aprobó una asignación puntual a la AVT, debido a que esta entidad no pidió la subvención con cargo al IRPF ya que en aquellos momentos estaba gobernada por una junta gestora.

El presidente del Partido Popular, Mariano Rajoy, también expresó su opinión, desde París: "Da la sensación de que el Gobierno está discriminando a las víctimas para echarle también la culpa de esto a Aznar". Hacer interpretaciones así "requiere una imaginación a prueba de bombas", sentenció. El PP pedirá explicaciones sobre esta cuestión en la próxima sesión de control al Gobierno.

Por otra parte, el Foro de Ermua, que comparte algunos planteamientos con la AVT, criticó algunas de las movilizaciones que esta asociación está preparando. Su presidente, Mikel Buesa, afirmó que está en contra de organizar visitas a cementerios. "El dolor es muy íntimo y no me parece hacer una exhibición de él para establecer algún tipo de crítica política", manifestó.