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LAS CUENTAS DEL AYUNTAMIENTO DE MADRID

Gallardón establece una nueva tasa para grandes productores de residuos

Los dueños de garajes pagarán el canon en función del número de coches que usen el vado

Los "grandes productores de residuos" de la capital -7.100 empresas, entre grandes superficies comerciales, oficinas y establecimientos hosteleros- tendrán que pagar a partir del año que viene una tasa especial para compensar el servicio que presta el Ayuntamiento al recoger sus basuras. La medida -que no afectará a las viviendas ni a los comercios con menos de 500 metros cuadrados- figura en el Plan Económico-Financiero 2006-2008, que también prevé triplicar los ingresos por la tasa de vados; ésta será modificada para que los dueños paguen en función del número de coches que usen el garaje.

El alcalde, Alberto Ruiz-Gallardón, y su edil de Hacienda, Juan Bravo, comparecieron ayer para presentar el Plan Económico-Financiero 2006-2008, un documento que había reclamado el Ministerio de Economía y Hacienda y en el que el gobierno municipal explica cómo va a conseguir recuperar, de aquí a dos años, el equilibrio entre ingresos y gastos que exige la Ley de Estabilidad Presupuestaria. Ese equilibrio se ha roto porque el Ayuntamiento se ha endeudado hasta las cejas: la deuda ascenderá a 5.000 millones en 2006, y es ya la más alta de todas las grandes ciudades españolas.

Ruiz-Gallardón aseguró que logrará recuperar el equilibrio presupuestario "sin subir los impuestos de aquí a 2008" -aunque la oposición siempre ha sospechado lo contrario-, y el concejal de Hacienda agregó que tampoco se aumentarán tasas como la tarifa de la grúa o el precio de los parquímetros. La solución vendrá, según Bravo, por la creación de tasas nuevas -y selectivas-, la privatización de la red de alcantarillado y depuración de aguas (ver página siguiente) y la reducción de las inversiones después de cuatro años de obras.

- El precio de la basura. El Ayuntamiento gasta cada año 170 millones de euros en recoger y tratar las basuras producidas por sus ciudadanos y las empresas asentadas en su territorio. Vecinos y empresas pagan lo mismo por ese servicio: nada. Pero el volumen de residuos que generan unos y otros es incomparable. "No es justo que las grandes superficies, que generan toneladas de basuras, paguen lo mismo, o sea, nada, que una familia normal y corriente que tira su bolsa todos los días", afirman desde la Concejalía de Hacienda. Con ese argumento, y asumiendo una propuesta de IU, el Ayuntamiento incorpora a partir de 2006 una nueva tasa -de entre 1.000 y 30.000 euros anuales- que pagarán "los grandes productores de residuos": 7.100 empresas con más de 500 metros cuadrados de local y que produzcan más de 960 litros de basura (se mide en litros) al día. Una tasa similar a la que tienen Málaga o Barcelona, y con la cual el gobierno de Ruiz-Gallardón prevé recaudar 28 millones al año.

- Garajes morosos. Sólo 35.000 garajes pagan ahora al Ayuntamiento la tasa correspondiente por tener un vado en la calle y producir, con el paso del coche, el desgaste de la acera. Los inspectores de Hacienda cifran el fraude en, al menos, un 25%, y calculan, por tanto, que hay otros 9.000 propietarios de vados que no están pagando nada. La concejalía está elaborando un inventario y en 2006 pretende localizar a esos morosos y hacerles pagar lo adeudado durante los últimos cuatro años, más una multa. Por eso, asegura Bravo, en los presupuestos del año próximo figura una recaudación por tasa de vados (36 millones) que casi triplica lo recaudado este año (13 millones).

Por eso y porque la tasa se va a modificar. Ahora se cobra en función de metros lineales de vado, de forma que paga lo mismo -unos 240 euros al año, aunque depende de la calle- un chalé unifamiliar con un vado de cuatro metros de ancho que un bloque de oficinas o un centro comercial con un vado también de cuatro metros, pero por el que pasan al día miles de coches. "El desgaste que sufre la acera y las molestias que se causa a los viandantes por la ocupación de la vía pública no son ni parecidos, así que la tasa no puede ser igual. Es injusto. Vamos a modificar los criterios para cobrar en función no de los metros de vado, sino de la intensidad del uso", explica Rosana Navarro, directora general de Tributos. Hacienda no ha decidido aún cuánto subirá el recibo ni a cuánta gente.

- Tasa del agua. El Ayuntamiento subirá el año próximo un 22% la tasa por depuración del agua, que supone a su vez un 20% del recibo total del agua (el resto lo cobra la Comunidad de Madrid). Eso significa que el recibo se incrementará aproximadamente un 4%.

- El impuesto de plusvalía crece en 2007. Ruiz-Gallardón aseguró hace meses y reiteró ayer que no va a volver a subir "ningún impuesto" de aquí a 2008. Sin embargo, en el Plan Económico-Financiero figura un incremento de más del 50% en 2007 en el impuesto de plusvalía (el que se paga por el beneficio obtenido en la compraventa de un inmueble). Esa subida, según el concejal Juan Bravo, no la ha decidido el gobierno municipal, sino que es fruto de la actualización del valor del suelo, que depende del Ejecutivo central.

"La Ley de Haciendas Locales establece que la subida catastral del inmueble no se paga de una sola vez, sino a lo largo de 10 años, para aliviar el pago: los primeros cuatro años se aplica sólo el 50% del valor real, y a partir del quinto año se aplica el 100%. La última revisión catastral se hizo en 2002, y el quinto año de cobro es 2007. Ese año, por tanto, se duplicará la base imponible del impuesto, lo que repercute en una subida de cerca del 50% en el impuesto final. Pero no es decisión nuestra", insiste el edil. En la práctica, eso significa que quien venda una casa en 2007 pagará un 50% más en impuesto de plusvalía que quien la venda antes de esa fecha. Y eso le supondrá al Ayuntamiento un ingreso extra de 125 millones.

- El IBI y los parquímetros. Con el recibo del impuesto de bienes inmuebles (IBI), el principal tributo municipal, pasa algo parecido: el Ayuntamiento subió el recibo cerca del 30% en 2004 -al eliminar los descuentos que existían hasta entonces-, y el alcalde se comprometió a que en 2005, 2006 y 2007 sólo subiría lo que subiera el IPC. Sin embargo, cada uno de esos años el recibo crecerá en torno al 10%, como han subrayado los grupos de oposición. "Es, de nuevo, por la actualización del valor catastral de los pisos, que va aplicándose progresivamente, por décimas partes, a lo largo de 10 años, y que no depende del gobierno municipal, sino del central", señala el concejal de Hacienda.

La recaudación por parquímetros crecerá un 21% de media entre 2006 y 2008, pero "no será por un incremento en las tarifas, que no se tocarán más que el IPC, sino por la extensión de la red de aparcamientos de pago a nuevas zonas de la ciudad", asegura Juan Bravo.

- La deuda sigue. El Plan Económico-Financiero 2006-2008 prevé que el Ayuntamiento siga endeudándose el año próximo y el siguiente (ver gráfico), pero agrega que, a partir de 2008, la nueva deuda contraída será ya menor a lo que se pagará para ir amortizando. Ese año, por tanto, se habrá alcanzado el "equilibrio presupuestario" que exige la ley.

- Inversiones. El anterior alcalde, José María Álvarez del Manzano, gastó en los últimos cuatro años de su mandato (1999-2003) una media anual de 500 millones de euros en obras e infraestructuras. Ruiz-Gallardón ha duplicado esa cifra, hasta los 966 millones anuales -el pico se producirá en 2006, con 1.290 millones, "el volumen de inversiones más alto de la historia del Ayuntamiento de Madrid", dijo Bravo-. Pero a partir de 2008 las inversiones bajan un 28%, y la tendencia se mantendrá en los años siguientes. "No habrá más grandes obras en la próxima legislatura, y probablemente tampoco en los siguientes 30 años", se atrevió a aventurar el alcalde.

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