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Entrevista:Rafael Simancas | Portavoz del PSOE | DEBATE DEL ESTADO DE LA REGIÓN

"La presidenta no gobierna, conspira"

Mábel Galaz

Rafael Simancas, 39 años, afronta el debate del Estado de la región en medio del enfrentamiento del PSOE y del PP por la situación de la sanidad regional. El portavoz socialista teme que "una vez más, la política de Estado que preside la actuación de Esperanza Aguirre perjudique a los madrileños".

Pregunta. ¿Cuál es el estado de la región?

Respuesta. El dinamismo económico de esta región es muy importante desde hace dos décadas. Sin embargo, contamos con un Gobierno que no da la talla. Esas potencialidades no se están transformando en soluciones para los problemas de los ciudadanos que son la educación y la sanidad, la atención a las personas mayores. También hay que hablar de la precariedad del empleo que se crea y de un modelo urbanístico que dificulta el acceso a la vivienda. Además, Aguirre actúa desde el Gobierno con unos niveles de sectarismo y confrontación que están generando dificultades objetivas en la necesaria cooperación de las administraciones y en el derecho de los ciudadanos a una información veraz y plural.

"Aguirre nos tomaba el pelo al decir que el medio ambiente prevalecería ante el urbanismo"
"En Madrid, más que un partido en el Gobierno hay un Gobierno de partido"
"El Partido Popular debilita los servicios públicos para abrir la puerta a los negocios privados"

P. Esperanza Aguirre ha elevado su discurso a clave nacional.

R. Aguirre actúa conforme a dos intereses: su interés por la confrontación con el Gobierno de España y su interés por fomentar determinadas iniciativas empresariales del ámbito privado contra el interés general. Eso es lo que está haciendo Aguirre, bien para ocultar su ineficacia o bien porque quiere erigirse en la campeona de los sectores más extremistas de la derecha española.

P. ¿Puede poner un ejemplo?

R. Hay tres asuntos capitales a los que ella tiene que enfrentarse: la financiación sanitaria, la coordinación en la ejecución de obras que traen a los madrileños locos y afrontar el grave problema de la sequía. Son asuntos que requieren del diálogo y la colaboración institucional entre administraciones. Pero Aguirre, en lugar de buscar la colaboración, busca la confrontación.

P. ¿A qué cree que se debe?

R. Siempre hemos dicho que en Madrid más que un partido en el Gobierno tenemos un Gobierno de partido. Aguirre antes que actuar conforme a los intereses de los madrileños, lo hace conforme a los intereses sectarios de su partido. Ella está muy interesada en ejercer de reclamo de referencia a los intereses más nostálgicos de la derecha española, a los intereses del aznarismo.

P. ¿Quiere decir que Aguirre antepone la política de su partido a los intereses de los madrileños?

R. Raro es el día que ella no comienza una batalla de enfrentamiento, bien contra su compañero de partido en el Ayuntamiento o bien contra el Gobierno nacional. Aguirre no gobierna, conspira. Tenemos una presidenta con una actitud y lenguaje de oposición y, sin embargo, tenemos una oposición que está planteando una actitud y un lenguaje propios de un Gobierno llamando al acuerdo.

P. Ustedes han propuesto a Aguirre pactos sobre sanidad, educación y sequía.

R. Uno de los problemas más graves es la calidad del servicio público sanitario, que está amenazado por los manejos que está haciendo el Gobierno de Aguirre y por el colapso que hay en las urgencias. Estas deficiencias tienen relación directa con la financiación sanitaria. Tenemos el gasto sanitario por paciente más bajo de todas las comunidades. La media de gasto en España está en 954 euros por habitante; y aquí en torno a los 870 y poco. Aguirre debería de aceptar la ayuda financiera que ofrece el Gobierno de España, que serviría para contratar a 3.000 o 4.000 nuevos profesionales sanitarios, construir y poner en marcha un nuevo centro de especialidades, al menos, por cada área sanitaria, contar con un centro de atención primaria para cada 15.000 habitantes y para reformar todos los servicios de urgencia en los hospitales. Además de ese dinero, Aguirre debería de comprometerse a incrementos presupuestarios anuales y a renunciar a los regalos fiscales en sucesiones y donaciones que ha planteado de cara a las grandes fortunas.

P. ¿Y en educación?

R. Afrontamos el curso escolar en muy malas condiciones. En relación al gasto, también estamos a la cola de las comunidades españolas que están gastando por encima del 4% del gasto interior bruto en educación. Aquí no llegamos al 2,8%. Estamos en el 80% de gastos educativos por alumno con respecto al conjunto España. Tenemos problemas graves de escolarización en enseñanza infantil de 0 a 3 años, unas 20.000 plazas, según han denunciado los padres. En los nuevos barrios hay 40.000 familias viviendo, pero sólo 1.000 plazas. Tenemos problemas, incluso, en algunos barrios consolidados porque no se amplían plazas y llegan inmigrantes. Aguirre no está cumpliendo el pacto que firmó con la comunidad educativa.

P. ¿Las políticas sociales son, por tanto, lo peor de Aguirre?

R. Aguirre está debilitando los servicios públicos para abrir la puerta a los negocios privados, que pueden suponer desigualdad a la hora de atender las necesidades de la gente.

P. ¿Los pactos, por lo tanto, parecen imposibles?

R. Esperanza Aguirre debería estar haciendo lo que otros presidentes autonómicos del PSOE y de PP están haciendo: negociar con los diferentes departamentos ministeriales las inversiones para sus respectivas comunidades. Pero ella y su Gobierno están en el reproche y la confrontación. Si quieren nuestro apoyo para hacer frente a la sequía, a las inversiones de Fomento o a la sanidad, les ofrecemos diálogo.

P. Cuando Aguirre llegó a la Comunidad, dijo que el medio ambiente siempre estaría por encima del urbanismo.

R. Nos tomaba el pelo. El equilibrio ambiental se ha subordinado claramente a objetivos de especulación urbanística en todos los desarrollos que ha promovido la Comunidad y el Ayuntamiento de Madrid. En prácticamente todos los grandes municipios gobernados por el Partido Popular, hemos tenido escándalos de este tenor. Podíamos hablar de las implicaciones ambientales que tiene la reforma de la M-30 o la pretensión de crear una autovía Madrid-Ávila que va a generar un deterioro ambiental grave en el suroeste de la Comunidad. El incumplimiento de aquella promesa ambiental ha llegado a tal punto que ha suprimido, de facto, la figura de la declaración de impacto ambiental al declarar determinadas obras de interés general. Aguirre ha finiquitado así esta figura garantista para el equilibrio ecológico de la Comunidad.

P. Ustedes desde su grupo también han criticado la política informativa del Gobierno regional.

R. Lo que está haciendo Aguirre en Telemadrid es de vergüenza ajena. El nivel de manipulación informativa ha llegado a tal punto que los índices de audiencia bajan, mientras los profesionales se niegan a firmar sus informaciones. Mantener una cadena pública en la que sus propios trabajadores denuncian la manipulación y se niegan a firmar sus informaciones requiere una cara dura extraordinaria. Y la adjudicación de televisiones locales se ha producido de una manera tan reprochable que hasta el conjunto de las asociaciones de televisiones locales ha tenido que acudir al Parlamento regional para denunciar esta situación y pedir el amparo de los representantes de los ciudadanos. Es lamentable. Pero Esperanza Aguirre no engaña a nadie. Cree que por controlar, entre comillas, muchos canales de comunicación, va a hacer pensar a los madrileños que la lista de espera en sanidad no supera los 30 días.

P. Usted, con sus declaraciones, describe un Gobierno muy a la derecha.

R. Estamos ante la derecha más extrema de España y de Europa, probablemente. El grado de confrontación institucional, el grado de sectarismo político, el grado de deterioro de servicios públicos para favorecer negocios privados en la Comunidad no tiene parangón en el resto de las comunidades autónomas gobernadas por el Partido Popular, ni tan siquiera en los gobiernos de Manuel Fraga. Esperanza Aguirre conscientemente va a pasar a la historia como la gobernante más radical de la derecha española. Y, además, me da la sensación de que presume de ello.

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Sobre la firma

Mábel Galaz
Fue la primera mujer en pertenecer a la sección de Deportes de EL PAÍS. Luego hizo información de Madrid y Cultura. Impulsó la creación de las páginas de Gente y Estilo. Ha colaborado con varias cadenas de televisión y con la Cadena Ser. Ahora escribe en El País Semanal.

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