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Fomento adjudica el proyecto de nuevos carriles-bus en la A-1 y A-2

Los dos tramos suman 22 kilómetros

La carretera de A Coruña (A-6) no será por mucho tiempo la única con un carril exclusivo para autobuses, vehículos con dos o más ocupantes y motos. El Ministerio de Fomento anunció ayer que ha adjudicado "los proyectos constructivos de los carriles-bus de doble dirección de la autovía de Burgos (A-1) y Barcelona (A-2)". Esta adjudicación, con un presupuesto de 1,5 millones, es el paso previo para la ejecución de las obras. Unos 15 millones de usuarios de transporte público pasan cada año por los tramos que ahora tendrán carril-bus: el de la A-1, de siete kilómetros, discurrirá entre el cruce con la M-40 y San Sebastián de los Reyes; el de la A-2, de 15 kilómetros, enlazará Arturo Soria y Torrejón de Ardoz.

El proyecto para la A-1 aprobado por Fomento incluye la construcción del carril-bus entre los kilómetros 12 y 19: es decir, entre la intersección de la A-1 y la M-40 y las proximidades de San Sebastián de los Reyes.

"Estas actuaciones", afirma el ministerio, "permitirán la descongestión de un número importante de vehículos en las incorporaciones y salidas de las calzadas principales". Fomento recuerda que "el transporte público que discurre por la A-1, a su entrada a Madrid, tendrá una plataforma independiente de siete kilómetros de longitud, favoreciendo el uso del mismo y disminuyendo el tiempo de recorrido de los usuarios de este servicio".

Sin embargo, entre la M-40 y la plaza de Castilla, el tramo final de entrada a la ciudad, no habrá carril-bus de momento. Sólo existe, en este caso, un "estudio previo del diseño de prolongación de las calzadas para el transporte colectivo en el tramo de competencia del Ayuntamiento de Madrid". El ministerio reconoce, además, que para poder construir el carril-bus en el tramo elegido de siete kilómetros podría ser necesaria "la reducción del ancho de los carriles en el tronco de la A-1".

El proyecto -que incluye la reforma de los enlaces en los puntos kilométricos 15, 17 y 19- ha sido adjudicado a la empresa Eptisa Servicios de Ingeniería por 548.000 euros.

En el caso de la carretera de Barcelona (A-2) los planes del Ministerio de Fomento son más ambiciosos: el proyecto -adjudicado a la empresa Prointec por 952.000 euros- consiste en la construcción de un carril-bus entre los kilómetros 5,3 y 20,3, que coinciden con la calle de Arturo Soria y los límites de Torrejón de Ardoz. "De esta manera", dicen los responsables del departamento, "el transporte público que discurre por la A-2 a su entrada a Madrid tendrá una plataforma independiente de 15 kilómetros de longitud, lo que favorecerá el uso del mismo y el tiempo de recorrido".

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En este tramo también se crearán vías de servicio en el nudo de Eisenhower y el puente de San Fernando, uno de los puntos más peligrosos de las carreteras madrileñas. En su comunicado, Fomento subraya que va a mejorar el "trazado de la autovía en la zona del puente".

Como apenas hay espacio para construir estos carriles adicionales -la A-2 ya fue ampliada con un carril más por el anterior Gobierno, presidido por José María Aznar, lo que obligó a reducir las medianas-, Fomento reconoce ahora que también estudia "la reducción del ancho de los carriles en el tronco de la A-2".

Esta carretera, a causa del crecimiento urbanístico, ha visto surgir numerosas edificaciones junto a los arcenes, lo que hace muy difícil la ampliación de su anchura.

Avenida de Logroño

El ministerio está procediendo actualmente a la construcción de un túnel en la A-2 a la altura de la carretera de Canillejas, lo que complicará aún más la realización del carril-bus. Por eso, Fomento explica en su nota oficial que "el proyecto [de construcción del carril-bus] deberá coordinarse con las obras recientemente adjudicadas de conexión de la calle de Alcalá con la avenida de Logroño".

El ministerio recuerda que "ambas actuaciones [en la A-1 y la A-2] forman parte del plan de carriles-bus que anunció el pasado marzo la ministra de Fomento, Magdalena Álvarez, y que dotará de 200 kilómetros [en realidad 100, porque Fomento cuenta la ida y la vuelta] de carriles-bus a la Comunidad de Madrid". "Este plan", continúa la nota, "tiene como fin potenciar el uso del transporte público y, por tanto, descongestionar el tráfico de entrada y salida de la capital, así como incrementar la seguridad vial".

Por otra parte, Fomento ha adjudicado el proyecto de la variante de San Martín de Valdeiglesias en la carretera N-403, entre los puntos kilométricos 79 y 81. El objetivo es evitar los problemas de tráfico que se producen en la travesía de dicha localidad.

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