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Los socialistas alaveses reiteran su rechazo a las mociones de censura del PNV

El PSE ratificó ayer su rechazo a las mociones de censura presentadas por el PNV contra el diputado general de Álava, Ramón Rabanera, y el alcalde de Vitoria, Alfonso Alonso. Con este rechazo y el anuncio de una ronda de contactos entre todos los partidos del territorio, los socialistas pretenden retomar la iniciativa política en Álava, donde el PP gobierna en minoría y aislado del resto de los partidos. El portavoz del PSE alavés, Juan Carlos Prieto, pretende concluir este mismo mes esa ronda y otra serie de entrevistas con los agentes sociales, como sindicatos, empresarios, medios de comunicación y Cámara de Comercio.

El objetivo de ambas rondas es "buscar soluciones" que garanticen la gobernabilidad del territorio. Según Prieto, la mejor fórmula para conseguir la estabilidad es conformar gobiernos de concentración, tanto en la Diputación como en el Ayuntamiento. En ese ejecutivo tendrían cabida todos los partidos o, al menos, los más importantes. "Preguntaremos a la sociedad por dónde cree que se puede resolver la situación y le ofreceremos a la vez las ventajas de un gobierno de concentración". Entre estas ventajas, Prieto apuntó que un ejecutivo de este tipo permitiría que "todos los partidos importantes arrimen el hombro", que sumen esfuerzos y que sean generosos para no buscar réditos políticos y garantizar la gobernabilidad para lo que resta de legislatura.

Desde la ejecutiva del PSE de Euskadi, su portavoz Rodolfo Ares también rechazó las mociones. Sin embargo, a diferencia del planteamiento de su compañero Prieto, la apuesta de la ejecutiva vasca es de que el territorio alavés cuente con "gobiernos fuertes, progresistas y constitucionalistas", lo que complica la presencia de los nacionalistas.

Desmarque

Además del rechazo socialista, el PNV se ha encontrado con un inesperado contratiempo en el desmarque de Eusko Alkartasuna y Ezker Batua. Ambos partidos hubieran preferido consensuar previamente con los socialistas la presentación de las mociones, ya que sin el apoyo de éstos la iniciativa está abocada a fracasar. Según Prieto, el PNV "ha querido correr más que los demás sin tener el terreno preparado". En el caso de las Juntas Generales, el tripartito formado por PNV, EA y EB sólo tiene 22 de los 26 votos necesarios para sacar adelante la moción. En el Ayuntamiento de Vitoria la situación les resulta aún más desfavorable, ya que la normativa municipal obliga a presentar la moción con la firma de al menos 14 de los 27 concejales. PNV, EA y EB tienen un total de 11.

Rabanera y Alonso se reunieron ayer con el presidente del PP, Mariano Rajoy para analizar la situación creada. Tras el encuentro, Rabanera hizo un llamamiento a los socialistas para que participen en los gobiernos de la Diputación y del Ayuntamiento.

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