Una juez federal interviene el Partido Justicialista argentino

A menos de dos meses de la celebración de las elecciones legislativas argentinas, una juez federal ordenó ayer la intervención del principal partido del país y favorito a la victoria en los comicios, el Partido Justicialista (PJ, peronista) por considerar que vive una situación de "acefalia" desde el año 2003. La decisión supone un brusco giro y llena de incertidumbre la pugna abierta por el presidente Néstor Kirchner y el ex presidente Luis Eduardo Duhalde por el poder en el interior del peronismo.

La juez federal María Servini de Cubría tomó la decisión después de corroborar que desde hace dos años el PJ ha sido incapaz definir quienes son las autoridades que deberían reemplazar a los responsables de la formación pertenecientes a la época del presidente Carlos Menem (1989-1999).

La intervención judicial confirma el caos organizativo y las luchas entre numerosas facciones del histórico partido cuyos principales candidatos concurrirán a las elecciones del 23 de octubre en listas separadas.

La dirección del partido elegida en el Congreso celebrado hace más de un año renunció a causa del enfrentamiento desatado entre la senadora Cristina Fernández, esposa de Kirchner, y Hilda Chiche' Duhalde, esposa del ex presidente Duhalde. Ambas se disputan un escaño en el Senado la primera bajo las siglas Frente Para la Victoria y la segunda con el PJ.

La tensión entre las diferentes facciones fue aumentando y han terminado por estallar en la campaña electoral. Un congresista y líder piquetero partidario de Kirchner señaló hace tres semanas a Duhalde como narcotraficante. Ayer Hilda Duhalde, en declaraciones a una emisora de radio, acusó al Gobierno de desviar fondos para usarlos en la campaña electoral y utilizó la palabra "impunidad", término ligado en Argentina a la dictadura.

Además, otras destacadas personalidades del PJ como los ex presidentes Carlos Menem y Adolfo Rodríguez Saa -aliados entre ellos y enfrentados con todos los demás- han entrado en el conflicto exigiendo elecciones internas. Kirchner se ha mostrado partidario de regularizar la situación en 2006 y evitar las primarias en un año electoral.