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Portugal recibe ayuda europea tras declararse incapaz de acabar con los incendios

El presidente Sampaio llama a la unidad nacional ante el avance de las llamas

Por tercer verano consecutivo, el fuego arrasa enormes extensiones de terreno en Portugal. Al menos 35 incendios permanecían ayer activos en varias zonas del país, después de que el Gobierno reconociese la insuficiencia de sus medios y solicitara ayuda a la Comisión Europea. Alemania, España, Francia e Italia enviaron aviones y helicópteros, mientras el presidente portugués, Jorge Sampaio, hacía un llamamiento a la unidad nacional para combatir las llamas.

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Evacuada una población del distrito de Coimbra por el avance del fuego

"Es un momento muy grave para Portugal", declaró Sampaio durante la visita a un centro del Servicio Nacional de Bomberos y Protección Civil (SNBPC) cerca de Lisboa. Sampaio subrayó que la prioridad, en este momento, es "socorrer a las poblaciones y acabar con los incendios". Pero a reglón seguido subrayó que es necesario reflexionar sobre el origen de tanta devastación.

España envió a Portugal dos hidroaviones Canadair, uno de los cuales estaba ya operativo ayer por la tarde en la zona de Viana do Castelo, cercana a la frontera con Galicia. También se esperaba la llegada de dos aviones similares procedentes de Francia y de tres helicópteros Super Puma alemanes con 25 especialistas a bordo. Desde Italia, último de los cuatro países en sumarse a la petición de ayuda, un hidroavión despegó por la tarde de Roma.

Según cifras del SNBPC, unos 3.600 bomberos trataban anoche de frenar el avance del fuego en 12 de los 18 distritos de Portugal. Nubes de humo procedentes de los incendios cubrieron Lisboa. Además, permanecían desplegados en distintos puntos del país 24 pelotones del Ejército con un total de 528 soldados.

El distrito de Coimbra, en el centro de Portugal, era el más dañado por el fuego. Allí, en el término municipal de Pampilhosa da Serra, continuaba anoche activo el frente que más preocupaba a los bomberos. Además de Lisboa, los distritos de Santarém y Aveiro (centro) también permanecían afectados por focos incontrolados.

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Portugal sufre este verano la peor sequía que se recuerda. Los incendios han arrasado en lo que va de año unas 134.000 hectáreas de bosque, más que en todo 2004. Al menos 13 personas han muerto este año, 10 de ellas bomberos.

Carencia de medios

El ministro del Interior, Antonio Costa, tuvo que comparecer públicamente en la noche del sábado para reconocer la carencia de medios contraincendios, a la vez que anunció la movilización de 2.000 unidades de la GNR, cuerpo policial con organización militar.

El presidente de la Comisión Europea, José Manuel Durão Barroso, visitó algunas zonas afectadas por los incendios forestales y prometió que Bruselas hará todo lo posible para ayudar a Portugal a combatir las llamas. El ex primer ministro portugués, que pasa sus vacaciones en el norte del país "quedó impresionado con la dimensión de las llamas", dijo un portavoz.

La Comisión Europea ha coordinado -a través del Mecanismo Comunitario de Protección Civil- la respuesta a la solicitud de auxilio portuguesa y se mantiene en alerta por si fuese necesario recabar nuevos medios de los socios comunitarios. "La respuesta obtenida hasta ahora ya es bastante significativa", declaró Rupert Krietemeyer, portavoz de la Comisión Europea.

Un retén de bomberos observa las llamas en un bosque cerca de Pampilhosa da Serra.
Un retén de bomberos observa las llamas en un bosque cerca de Pampilhosa da Serra.REUTERS

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