A la Luna por 80 millones

La Corporación Espacial Energuía, a la que pertenecía la estación Mir y diseñadora de gran parte de los módulos rusos de la Estación Espacial Internacional (ISS), propone a los multimillonarios deseosos de aventuras arriesgadas un viaje a la Luna. Cada turista selénico deberá desembolsar la módica suma de unos 80 millones de euros.

La duración mínima del viaje será de dos semanas y hay dos posibilidades: vuelo directo o con escala en la ISS. En este último caso el turista espacial parte en una nave Soyuz a la ISS, donde permanecerá una semana. Durante este tiempo, se acostumbrará la ingravidez, mientras observa cómo montan la nave en la que continuará vuelo a la Luna: para que la Soyuz siga a la Luna desde la ISS se utilizará una unidad de aceleración DM-3, de las que se usan en los lanzamientos de satélites artificiales desde el océano. En la nave irán el turista y el piloto. En el vuelo directo la Soyuz y la etapa de aceleración se acoplan en órbita de la Tierra.

Ya hay un voluntario para pilotar la arriesgada misión: se trata del coronel Yuri Shargún, astronauta que el año pasado voló a la ISS. De los 80 millones que deberá pagar el turista, unos 2,8 millones serán para el piloto. La nave rodeará la Luna, sin descender, y luego regresará directamente a la Tierra.

Teóricamente existen todos los componentes técnicos para realizar semejante viaje, pero el problema es que nunca han sido probados en su conjunto. Los riesgos son, pues, enormes, sobre todo debido a la utilización de la unidad de aceleración, que deberá unirse a la nave Soyuz. Precisamente a la DM-3 se debe gran parte de los fracasos en la puesta en órbita de satélites.

El proyecto es "absolutamente realista", según el director de la corporación Energuía, Nikolái Sevastiánov, quien subrayó que el ofrecimiento del paquete turístico a la Luna se enmarca dentro de los planes más ambiciosos para la explotación del satélite natural de la Tierra. "Hay que crear instalaciones industriales en la Luna y más allá", señaló Sevastiánov. "El turismo lunar no es un fin en sí mismo, sino uno de los estímulos que permitirán realizar los planes de conquista del satélite", añadió.

La Agencia Federal Espacial de Rusia confirmó que ha recibido oficialmente una petición por parte de Energuia para ofrecer viajes turísticos a la Luna. La decisión será tomada una vez que se estudien todos los riesgos.

El sector privado estadounidense no quiere quedarse fuera de esta carrera y la empresa Space Adventures ya ha firmado un acuerdo con el Gobierno ruso para participar en el programa, informa Sandro Pozzi. Se trata de la misma compañía que gestionó la puesta en órbita de Dennis Tito y Mark Shuttleworth, que pagaron 20 millones de dólares cada uno por pasar unos días en la ISS en 2001 y 2002 respectivamente.

Eric Anderson, consejero delegado de esta agencia de viajes espaciales, cree que será posible hacer los primeros vuelos en 2008. La compañía calcula que entre 500 y 1.000 personas podrían permitirse este exclusivo viaje. Los expertos recuerdan que las Soyuz son naves bastante pequeñas e incómodas. El futuro turista espacial se convertiría, descontando el piloto, en la vigésimo octava persona en llegar a la órbita lunar y la primera en los últimos 33 años.