Al menos 66 víctimas en combates en Nepal

Al menos 40 soldados del Ejército nepalés y 26 rebeldes maoístas murieron en la madrugada del lunes en un ataque de la guerrilla a una base del noreste del país, informaron ayer fuentes de las Fuerzas Armadas. Es ésta la peor ofensiva de la guerrilla maoísta en Nepal desde que el rey Gyanendra se hizo con el poder el pasado febrero.

El enfrentamiento se produjo en la región de Kalikot, una zona montañosa a unos 600 kilómetros de Katmandú, la capital de Nepal. Los rebeldes atacaron un campo militar que tenía como objetivo la protección de los trabajadores encargados de construir una carretera.

"Los terroristas raptaron y mataron de forma inhumana a 40 miembros de las fuerzas de seguridad", señaló ayer el Ejército en un comunicado oficial. Los militares fueron asesinados con un disparo a la cabeza y, en algunos casos, los rebeldes se ensañaron con los cuerpos y los mutilaron. Ayer todavía no se tenían noticias de 76 de los 226 soldados desaparecidos tras el combate, mientras que 111 militares consiguieron ponerse en contacto con el grueso del contingente y volver a la base.

Los rebeldes de la guerrilla maoísta, que sufrieron 26 bajas en el enfrentamiento, afirmaron por su parte haber matado a 159 miembros de las Fuerzas Armadas de Nepal. El ataque de la guerrilla, que duró 11 horas entre la noche del domingo y la madrugada del lunes, constituye el golpe más duro para el rey Gyanendra, quien el pasado 1 de febrero destituyó al Gobierno y asumió el control absoluto del país.

El principal objetivo de Gyanendra era contener la ofensiva de los maoístas, que desde 1996 luchan por derrocar la monarquía y en los últimos meses han intensificado sus ataques. EEUU, el Reino unido e India suspendieron en la pasada primavera la ayuda a las Fuerzas Armadas nepalesas, en un intento de presionar al rey para que restablezca la democracia y los derechos fundamentales.