El PP exige al Gobierno vasco que prohíba la manifestación de Batasuna en San Sebastián

Batasuna pretende llenar el domingo las calles de San Sebastián de manifestantes en la marcha que la formación abertzale convoca cada año coincidiendo con el inicio de las fiestas de la ciudad. El portavoz de la formación ilegalizada, Arnaldo Otegi, presentó ayer públicamente la convocatoria, que lleva el mismo lema de su propuesta de Anoeta: Ahora el pueblo, ahora la paz. El PP teme que la marcha derive en desórdenes públicos, por lo que ayer exigió al Gobierno vasco que impida su celebración. La Consejería de Interior aún no ha decidido si la prohibirá.

La manifestación está convocada a las 17.00 en el Boulevard donostiarra. Muy cerca de ese punto, a las 20.30, está previsto dar inicio a las fiestas con el tradicional disparo del cañón. Así viene ocurriendo en los últimos años, incluso después de la ilegalización de la formación abertzale. Los independentistas recorren las calles de la capital guipuzcoana poco antes de comenzar los festejos.

La celebración de la manifestación ha sido ya comunicada a la consejería de Interior, que aún no ha decidido si la prohíbe. Fuentes del departamento se negaron a precisar quién era la persona que figira como convocante y se limitaron a señalar que informarán de si se prohíbe o no la marcha.

En 2003, Interior prohibió inicialmente la convocatororia alegando que, aunque había sido comunicada por una particular, sus convocantes "reales" eran dos dirigentes de Batasuna, que habían dado una rueda de prensa llamando a acudir al acto. El Tribunal Superior vasco rechazó luego esta prohibición por no ser ajustada a derecho. En la manifestación se produjeron incidentes (la quema de una bandera española por unos encapuchados en presencia de Otegi y una sucesión de vivas a ETA) que motivaron la apertura de un proceso judicial.

El año pasado la manifestación, anunciada públicamente como ayer por Otegi, tampoco fue prohibida.

Otegi llamó a la "movilización popular" para "apoyar el esfuerzo que está haciendo la izquierda abertzale por construir un escenario diferente en nuestro país". Se refería así a la apuesta de su partido por abrir un proceso de diálogo sin exclusiones que culmine con la aceptación de la voluntad de los vascos. Así se refleja en la propuesta de Anoeta, que Batasuna hizo pública el pasado 14 de noviembre en el Velódromo de Anoeta, en San Sebastián, bajo el lema Ahora el pueblo, ahora la paz, el mismo elegido para la marcha de este domingo.

Adelantándose a la resolución de Interior, la presidenta del PP de Guipúzcoa, María José Usandizaga, exigió a la consejería que "ponga los medios necesarios para impedir" el acto de protesta. Usandizaga recordó que Otegi habla "en nombre de una formación ilegalizada" y que por tanto "no puede convocar legalmente manifestaciones". Además, la dirigente popular alertó del riesgo de que se produzcan desórdenes.

Sacó a colación el rebrote de terrorismo callejero que vive el País Vaco en la actualidad y los graves episodios sucedidos recientemente en las fiestas de Getxo, donde los vándalos causaron graves destrozos en seis entidades bancarias y otros establecimientos.

De su lado, el secretario general del Grupo Socialista en el Congreso de los Diputados, Diego López Garrido, consideró que la legalidad de la marcha "es algo que tendrán que decidir en su momento los jueces si hay impugnaciones".

Oportunidades y obstáculos

Batasuna pretende que esta manifestación refuerce su deseo de lograr "acuerdos sólidos" entre los partidos para poner en marcha un proceso de resolución del conflicto con "garantías" y de forma "definitiva", dijo Otegi. En una rueda de prensa en la que le acompañaron otros miembros de su formación, el líder independentista se mostró convencido de que existe "una posibilidad real" de lograr la paz en el País Vasco.

En este sentido, restó importancia a los encuentros que han mantenido recientemente PSOE y PNV porque son un "acercamiento" para hablar de los presupuestos. Otegi señaló que el "proceso de superación del conflicto" se encontrará con "oportunidades y obstáculos". Entre éstos, citó la actitud de los Gobiernos de España y Francia, que niegan "los derechos históricos y democráticos del pueblo vasco".