45 años de arte feminista y su contexto conformarán una exposición en Bilbao

El arte feminista y su contexto serán abordados en una exposición que prepara el Museo de Bellas Artes de Bilbao. La muestra titulada, Kiss Kiss Bang Bang, ordenará por décadas el trabajo de mujeres artistas y el contexto teórico y social del movimiento feminista que rodeó la creación de sus obras. Desde el feminismo de los años 60 de Yoko Ono y La mística de la femineidad, de Betty Friedan, hasta las obras de Itziar Okariz y los escritos de las Guerrilla Girls que han visto la luz ya en el siglo XXI estarán en la muestra, que se presentará en otoño de 2006.

El comisario de Kiss Kiss Bang Bang, Xabier Arakistain, defiende que el arte feminista es el último movimiento de vanguardia del siglo XX y el que más radicalmente ha transformado el mundo del arte. El reconocimiento a las artistas feministas gana espacio, y no sólo en el debate teórico. La artista Barbara Kruger (Nueva Jersey, 1945), por ejemplo, ha recibido el pasado mes de junio el León de oro de la Bienal de Venecia, concedido a toda su carrera.

La exposición propone detenerse en el 2005 y mirar hacia atrás para ver el impacto en las artes visuales de 45 años de feminismo; el tiempo que "las mujeres han representado a las mujeres", dice Arakistain. El proyecto no se limita a exhibir las obras de arte, sino que las mostrará en paralelo con las reflexiones teóricas y las acciones políticas y sociales del feminismo.

La muestra seguirá un recorrido cronológico que partirá de finales de los años 60 y llegará hasta la actualidad. Este viaje por los 45 años de arte y feminismo se estructurará por décadas. Cada una de ellas estará representada por obras de cinco artistas, que se confrontarán con otras tantas publicaciones teóricas relevantes de la época.

Tercer pilar

El tercer pilar de la exposición será el material gráfico de acciones de la lucha política y social de las mujeres, y las exigencias y preocupaciónes del movimiento feminista en cada década. "La exposición relacionará los tres planos: el artístico, el teórico y el social", explica el comisario. "La exposición quiere reflexionar sobre la forma en la que las mujeres representan a las mujeres y preguntarse si son distintas de las representaciones masculinas tradicionales, que hacían de la mujer un espectáculo y del observador, el varón, el sujeto".

El recorrido cronológico comenzará con las obras de Carolee Schneemann, Yoko Ono, Nancy Spero, Faith Ringgold y Monica Sjöö. La teoría se remontará mucho antes de los años 60 con las obras pioneras del feminismo -Una habitación propia (1929), de Virginia Wolf y El segundo sexo (1949), de Simone de Beauvoir-, antes de entrar en la producción de esa década, como La mística de la feminidad (1963), de Betty Friedan, entre otras publicaciones.

Los años 70 estarán representados por las creaciones artísticas de Valie Export, Ana Mendieta, Judy Chicago, Mary Kelly y Orlan, y la teoría de Shulamith Firestone (La dialéctica del sexo, 1970) y Juliet Mitchel (Psicoanálisis y feminismo, 1974), junto a otros tres libros.

Para mostrar el arte feminista de la década de los 80 se han seleccionado trabajos de Cindy Sherman, Rosemarie Trockel, Barbara Kruger (Sin título. Your body is a battleground. Tu cuerpo es un campo de batalla, 1989), Guerrilla Girls (Tienen que estar las mujeres desnudas para entrar en el Metropolitan, 1989) y Sonia Boyce. Entre las reflexiones teóricas se presentarán los ensayos de Seyla Benhabib y Hacia una crítica de la razón patriarcal (1985), de Celia Amorós.

La cuarta década del recorrido por el arte feminista y su contexto pasa por las propuestas de Shirin Neshat, Kiki Smith, VNS Matrix, Lorna Simpson y Hanna Wilke, y las publicaciones de Judith Butler, Amelia Jobnes y Amelia Valcárcel. El recorrido se cierra con creaciones de los últimos cinco años, entre las que se ha seleccionado la obra de la artista vasca Itziar Okariz Mear en espacios públicos y privados, 2001-2003 y el ensayo sobre estereotipos femeninos de las Guerrilla Girls.

El título de la exposición quiere mostrar las contradicciones entre los estereotipos sobre las mujeres en las culturas patriarcales y la lucha por derribarlos. "Se trata de enfrentar la idea tradicional de la mujer como reposo del guerrero, su objetualización sexual en la cultura (kiss, beso) con la realidad de la mujer como sujeto activo y emprendedor, y luchadora por un estatus de ciudadana de primer orden (bang)". En ese segundo terreno se mueve el manifiesto difundido en la pasada edición de ARCO para proponer a los poderes públicos la extensión de las políticas de igualdad al mundo del arte y la aplicación de la política de cuotas en la organización de exposiciones y en la compra de obra para las colecciones públicas. Al mercado del arte el manifiesto le recuerda la máxima de las Guerrilla Girls: "Querido coleccionista: ¿cuánto valdrá su colección cuando el sexismo no esté de moda? [Más información: www.manifiestoarco2005.com]