Casa, empleo fijo, igualdad y paz
En esta Escuela de Verano de las Juventudes Socialistas de España, sus asistentes no mostraron interés por el debate intenso en el que están inmersos sus mayores. Ninguna de las preocupaciones que trasladaron los jóvenes a Zapatero tuvo relación con la unidad de España o las reformas de los estatutos de autonomía. Tampoco se le preguntó por ETA. Además, 15 meses después de las elecciones, estos jóvenes todavía no han encontrado motivos para mostrarse decepcionados con Zapatero, a juzgar por lo que ayer se apreció. Un interviniente de las Juventudes Socialistas de Euskadi, de manera colateral, se felicitó porque el resultado de las elecciones vascas conlleve, a su juicio, "el fin del plan separatista de Ibarretxe". Esto dio pie a Zapatero para asegurar que "lo mejor para Euskadi está por venir". Pero el interés de este chico estaba en el Plan Joven del Gobierno.
"Buenos días, compañero", le dijo Javi, de Navarra, a Zapatero para pedirle que "opinara mal sobre el PP". El líder del PSOE, entre las risas del auditorio y las suyas propias, señaló que no lo iba a hacer. Eso sí, señaló que al PP le queda aún "un año para hacer la digestión de la derrota".
Otro bloque de preguntas fue sobre la vivienda para jóvenes. Zapatero aprovechó para defender la gestión de la ministra María Antonia Trujillo, que hoy estará en esta escuela. Aseguró que en un par de años se apreciará el cambio en vivienda por la acción del Gobierno central.
El empleo fue otro de los asuntos por los que se interesaron los jóvenes. Zapatero aseguró que el Gobierno va a acometer "el problema" de la "precariedad e inestabilidad" del trabajo en España. Pronto habrá noticias, dijo, sobre el diálogo social entre patronal y sindicatos; además, habrá "mucho dinero" para conseguir empleo estable.
Almudena "de Madrid" quiso conocer medidas para "la igualdad entre hombres y mujeres" para conciliar vida laboral y familiar. Zapatero se extendió sobre las futuras leyes de Igualdad y de Dependencia.
Pero puso un énfasis especial en anunciar medidas prioritarias para evitar la catástrofe masiva de muertes en las carreteras. "El Gobierno ha dado pasos ya, pero está dispuesto a encabezar una gran movilización social para reducir drásticamente los accidentes de tráfico en este país. Una gran movilización social en la que me voy a implicar muy directamente porque además afecta esencialmente a los jóvenes de este país", dijo.
Añadió que no se puede seguir con las cifras de muertos de cada fin de semana, "muchos de ellos jóvenes".
Los jóvenes también se interesaron por la Alianza de Civilizaciones con apostillas contra la guerra de Irak, tal y como hizo un joven socialista de Melilla.
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