_
_
_
_
Cartas al director
Opinión de un lector sobre una información publicada por el diario o un hecho noticioso. Dirigidas al director del diario y seleccionadas y editadas por el equipo de opinión

La cultura musical, para las élites

Suscribo todo lo que dice la presidenta de la Confederación de Educación Musical, Bárbara Rivas, en la entrevista que publican en la edición del pasado 11 de julio. Como señala la profesora, la cultura musical -y en general artística- arrastra en España un déficit crónico, y, por paradójico que parezca, las sucesivas reformas educativas no hacen sino agravar la situación.

Soy padre de una niña que comenzó este curso la educación primaria. Si exceptuamos lengua, matemáticas y conocimiento del medio (ciencias naturales y sociales), que concentran la mayor carga lectiva, la distribución horaria semanal entre las restantes materias es la siguiente: tres clases de gimnasia, dos de inglés, dos de plástica, dos de "alternativa" (en su ingenuidad, la niña dice que unos niños han dado "religión" y otros "alternativa") y una de música. Y, al parecer, la reforma proyectada no va a reconducir esta situación.

Suscribo todo lo que dice Bárbara Rivas, incluso su apreciación de que "sólo las élites podrán disfrutar de la música", porque pueden pagar a sus hijos una educación musical que la escuela no ofrece. Yo formo parte de esa élite, pues convencido como estoy de los beneficios formativos de una buena cultura musical me gasto más de 120 euros al mes en clases para la niña en una escuela privada de música: lenguaje musical y violín. Para una economía doméstica media/media-baja como la de nuestra familia (admitan que me refugie en el pudor para no dar cifras, pero créanme), pagando en Madrid un alquiler mensual de ¡930 euros!, etc., la procura de aquella educación musical supone un muy notable esfuerzo.

El secreto, y el riesgo, es el siguiente: ahorro familiar cero. Y por lo que puedo saber de la gente que lleva a sus hijos a aquella misma escuela de música, la nuestra no es una circunstancia ni mucho menos excepcional.

No dudo, pues, de que formemos parte de la élite. Pero quería transmitir a los lectores mi experiencia para que tengan una idea más cabal de las muy variadas élites que existen. Sólo me queda animar a la profesora Rivas y a todos sus colegas a que continúen porfiando desde las aulas por la cultura musical en España.

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

¿Tienes una suscripción de empresa? Accede aquí para contratar más cuentas.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_