Alicante Acoge urge a intervenir para paliar la creciente mendicidad de niños rumanos en la ciudad

Las calles céntricas y comerciales de Alicante acogen un indeterminado número de inmigrantes, fundamentalmente de nacionalidad rumana, que ejercen la mendicidad acompañados de menores. El número de pequeños afectados, en su mayoría de la etnia romí (cíngaros o gitanos), se desconoce ante la falta de datos oficiales. Alicante Acoge reconoce "la dificultad" para integrar a la colonia romí, pero alerta a los servicios sociales de la Generalitat y del Ayuntamiento de la necesidad de intervenir ante la grave situación de riesgo del colectivo infantil. El carácter nómada y el apego a sus costumbres, basadas en la venta ambulante y en la mendicidad, acentúan los problemas de convivencia del colectivo.

Pedro Soriano, delegado de Junta de Personal del Ayuntamiento de Alicante y agente de la Policía Local, duda de la "efectividad" de legislar contra la mendicidad. Según Soriano, la sanción se limita a una multa que nunca puede sustanciarse por falta de solvencia de los pedigüeños. El margen de actuación de las autoridades se reduce cuando se trata de abordar la mendicidad con menores. Una sentencia del Tribunal Supremo, de noviembre de 2000, apreció que la mendicidad con menores no constituye un delito, en tanto que son los adultos los sujetos del acto de pedir limosna, ya que resultaría imposible que los niños mendiguen, dada su corta edad. Hasta la fecha, según la Policía Local de Alicante, los adultos sorprendidos pidiendo limosna con menores eran arrestados y los pequeños pasaban a disposición de los Servicios Sociales. "Ahora, ya no se hace nada por atajar la mendicidad infantil", dice un agente.

En 2001, la Consejería de Bienestar Social, en colaboración con el Ayuntamiento y la organización Alicante Acoge, anunció la elaboración de un protocolo de actuación con el fin de atajar la mendicidad de menores inmigrantes. Por su parte, la directora técnica de Alicante Acoge, Maialen Escalada, remarca la dificultad para integrar a los rumanos de etnia romí derivada de sus arcaicas tradiciones. "Es muy difícil trabajar con este segmento de la población", señala Escalada.