FCC sale del letargo

Al año de su renovación accionarial ultima la compra de una gran empresa y multiplica su actividad

FCC quiere recuperar y por la vía rápida el tiempo perdido, los seis años en los que las limitaciones de su socio francés le han descolgado del liderazgo de las grandes constructoras españolas.

El grupo dominado por Esther Koplowitz pugna en este momento, cuando se cumple un año de la renovación en su accionariado de control, por convertirse en el socio privado del Ayuntamiento de Madrid para reformar y gestionar durante 35 años la autopista urbana M-30 y por hacerse con los servicios de handling (asistencia en tierra a pasajeros y aviones) de buena parte de los aeropuertos españoles.

El grupo quiere protagonizar también una gran operación corporativa después del verano, y en las últimas semanas busca oportunidades de expansión en Europa del Este, ha inaugurado una nueva cementera en EE UU, y anuncia que no descarta sacar a Bolsa en el futuro su filial inmobiliaria Realia.

Cambio accionarial y giro estratégico con el objetivo de multiplicar por dos las ventas y el resultado bruto de explotación (ebitda) en tres años. Está poco endeudada y dispone de 3.000 millones para complementar con adquisiciones de empresas el crecimiento orgánico de sus actividades.

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