La niña del 'caso de la mampara' declara por vídeo que sufrió abusos
La Sección Segunda de la Audiencia Provincial de Barcelona dejó ayer visto para sentencia el polémico caso de la mampara, en el que ese tribunal ordenó que cuatro niñas que supuestamente sufrieron abusos sexuales por parte de su profesor de artes marciales cuando tenían entre 9 y 11 años declarasen en el juicio sin estar separadas visualmente del acusado. Tres de las menores ya comparecieron en el juicio y explicaron los tocamientos que presuntamente sufrieron, pero otra de ellas padeció un ataque de angustia y no pudo acudir.
En ese caso, el tribunal acordó, a la vista de los informes de los forenses, que la niña declarase por conferencia y así ocurrió ayer. El sistema informático funcionó, y la menor, de 11 años, declaró desde un juzgado de la localidad de Mataró y respondió a las preguntas que le realizaban desde el Palacio de Justicia de Barcelona.
La declaración se llevó a cabo a puerta cerrada, como ya ocurrió con las otras tres menores, pero fuentes judiciales explicaron que la niña se ratificó en que el profesor, Francisco C. S., la obligó en varias ocasiones a practicarle una felación, que la intentó penetrar analmente y que le hizo tocamientos durante meses.
Tras la declaración de la niña, las partes realizaron sus informes. La fiscal se ratificó en su petición de que se condene al profesor a 19 años de cárcel por cuatro delitos continuados de abusos sexuales. La fiscalía sostiene que las declaraciones de las niñas en el juicio fueron claras y persuasivas. También recordó que los psicólogos que las exploraron coincidieron en que su relato fue "lógico y convincente". El ministerio público entiende que eran unas niñas "normales, adaptadas y con familias estructuradas".
La tesis de la defensa
La abogada defensora, Inés Portabella, tiene un planteamiento muy distinto. En su opinión, a la niña que sufrió los peores abusos sexuales "le gusta llamar la atención de sus padres porque se siente abandonada ya que tiene una situación familiar delicada". La letrada, que solicita la absolución de su cliente, aludió a un informe realizado a la menor por la unidad de pediatría del hospital de Can Ruti (Badalona) en el que se asegura que presenta sentimientos de abandono y celos de su hermano.
Por todo ello, la defensa considera que la niña fabuló los abusos sexuales, y en tono irónico se felicitó por la "tranquilidad" con la que declaró ayer por videoconferencia. "Una niña que dice que ha sufrido tantos abusos no puede estar tan tranquila", dijo Portabella, quien opina que esa menor es el núcleo de unión con el resto de las menores, que mantienen una gran amistad entre ellas.
La abogada Lara Padilla, que ejerce la acusación particular, destacó que las niñas no fabularon y que siempre mantuvieron la misma versión de los hechos: ante la Guardia Civil, en el juzgado de instrucción, al ser visitadas por los psicólogos y en el juicio.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.