Una diputada socialista apuesta por "desincentivar" la prostitución con la regulación

"Desincentivar la prostitución desde la regulación". Ése fue el mensaje que trasladaron ayer la diputada socialista Antonia García y la ex senadora Cristina Kimowitz, ponente de la comisión especial sobre la prostitución. Ambas participaron ayer en la segunda y última sesión del III Congreso Internacional de Policía Local celebrado en Valencia.

Antonia García insistió en que la prostitución sigue teniendo una percepción femenina y que "es necesario trabajar desde la concepción y puesta en marcha de un plan integral que solucione y aborde esa realidad tan compleja desde los distintos ángulos que la componen". Según la diputada socialista, "los trabajos de la comisión especial sobre la prostitución que celebró sus sesiones en la séptima legislatura nos han servido para iniciar actuaciones específicas". Los datos que maneja sitúan en más de un 98% el número de mujeres extranjeras que ejercen la prostitución respecto al de españolas, según el balance presentado a finales de 2004. Antonia García precisó que la mayoría de esas mujeres procede del África subsahariana, de Latinoamérica y de los países del Este europeo. Y agregó: "La prostitución sigue estando envuelta de oscuridad, desconocemos muchas de las cosas. Cuanta más transparencia, más regulación, más evidencia demos a esa actividad, más capacidad tendremos para actuar sobre las mujeres que la ejercen".

12% de prostitución masculina

Cristina Kimowitz llamó la atención en su conferencia sobre la necesidad del ampliar también el horizonte de análisis a un fenómeno creciente: el de la prostitución masculina. La que fuera ponente de la comisión especial sobre la prostitución en el Senado dijo que "supone ya un 12% del total". Kimowitz aseguró que se siguen repitiendo tópicos que en nada favorecen una mayor conciencia social sobre la realidad de la prostitución porque "domina el componente de género supeditado a una concepción machista y patriarcal que otorga determinados derechos de dominación y sometimiento a las mujeres". La ex senadora dijo que en los últimos años ha crecido de forma importante el número de mujeres que en las zonas periféricas de grandes ciudades ejercen la prostitución, llamó la atención sobre la necesidad de encontrar un punto intermedio entre "la legalización sin más y la ceguera ante algo que como no es ilegal parece que no existe", y defendió "la educación como el mejor sistema para sensibilizar a la población sobre la violación de derechos que supone la prostitución en la mayoría de los casos". Según su análisis, la inmensa mayoría de las prostitutas que trabajan en España son extranjeras y "no vienen engañadas, saben qué van a hacer, dónde y en qué condiciones, lo que desconocen es que la deuda que contraen para llegar aquí se va a ir multiplicando sin fin, aceptan inicialmente porque saben de sobra que es una forma fácil y rápida de hacer dinero".