'La Piedad', de Rubens, no tiene comprador por tres millones

La tabla La Piedad, de Pedro Pablo Rubens (1577-1640), no encontró ayer comprador en la subasta celebrada en la sala Retiro, de Madrid (avenida de Menéndez Pelayo, 3, www.salaretiro.com). Su precio de salida era de tres millones de euros y el Ministerio de Cultura lo había declarado exportable. La obra tampoco se vendió en 1996 en la misma sala de Caja Madrid en un precio estimado en seis millones de euros.

La Piedad, óleo sobre tabla de 140 por 114 centímetros, puesta a subasta por un particular madrileño que la conserva desde 1950, ha estado expuesta en la Sala Retiro tras un tresillo francés estilo transición del siglo XIX y una pareja de jarrones franceses estilo Napoleón III hasta horas antes de la subasta extraordinaria que termina hoy. La obra, realizada entre 1620 y 1621, tiene en la trasera de una de las cinco tablas ensambladas marcas de los talleres de Amberes y de la municipalidad de la ciudad, que coinciden con las de Las tres gracias, de Rubens, que se expone en el Prado, según la casa de subastas.

Añade que la tabla está en buen estado de conservación, "ya que ni el soporte ni la pintura han sufrido alteraciones tras los procesos de restauración". Procede en origen de la iglesia parroquial de Ventosa del Río Almar (Salamanca), villa de intensa actividad comercial desde la Edad Media y feudo de los Duques de Alba. La obra, según el catálogo, se ha colgado en la exposición Rubens y su siglo, en 1999, en el Museo Nacional de San Carlos, en México, y en el Palazzo dei Diamante de Ferrara, y figura en el estudio La pintura flamenca del siglo XVII en España (Madrid, 1976), de Matías Díaz Padrón, conservador del Prado.

Tampoco se vendió en la subasta de ayer la tabla del flamenco Jan Brueghel II Alegoría de los cinco sentidos, que salía a un precio de 85.000 euros, ni un óleo sobre tabla de pequeño formato pintado por Julio Romero de Torres cuando tenía entre 14 y 16 años, que tiene el título de Joven fumando, que salía por 30.000 euros.

Entre los lotes de la subasta figuraba la obra del flamenco Jan Van der Straet, más conocido por su nombre italianizado, Giovanni o Ioanes Stradanus, Crucifixión, ejemplo de síntesis del Renacimiento del norte de Europa y el italiano. Otros pintores presentes en la venta de la Sala Retiro fueron Francisco Pradilla, Pablo Salinas y Domingo Muñoz Cuesta. El paso a la modernidad lo marcan dos óleos de Ricardo Canals, ejemplo de pintura posimpresionista de marcada influencia francesa. Y en la figuración contemporánea, el cubano Wifredo Lam, con un paisaje de primera época con precio de salida de 60.000 euros, y el español Benjamín Palencia, fundador de la Escuela de Vallecas, con Era con caballos azules, fechada en 1963, en 30.000. También se presentaron lienzos de grandes paisajistas contemporáneos como José Lupiáñez, Miquel Llabres o Rodríguez Lobo, y tres óleos del chileno Guillermo Muñoz Vera. Los precios de salida oscilaron entre los 15.000 y 25.000 euros.

La tercera sesión de la subasta extraordinaria se celebra hoy, a las seis de la tarde, con lotes de escultura (Salzillo, Ochoa), objetos de colección (azulejos de Talavera) y muebles (cómoda francesa).