Adegi ratifica a su candidato y considera zanjada la crisis por la sucesión de Knörr

La asamblea general de la patronal guipuzcoana Adegi ratificó ayer a Miguel Lazpiur como candidato a sustituir a Román Knörr en la presidencia de la patronal vasca Confebask y dio por resuelta la crisis abierta tras designación sin comunicación previa a las organizaciones empresariales de Álava y Vizcaya. El presidente de Adegi, José Martín Echeverría, expresó su apoyo a Lazpiur "en su nueva misión" y aseguró que las relaciones con el SEA y el Cebek son "muy buenas".

Los empresarios de Guipúzcoa, que ayer celebraron su asamblea anual en el Parque Tecnológico de Miramón, agradecieron a Lazpiur que haya aceptado ser candidato a la presidencia de turno de Confebask, "por lo que de compromiso institucional representa". La directiva de Adegi dio por seguro el nombramiento de Lazpiur como sucesor de Knörr, pese a la tensión que su propuesta generó con las patronales de Álava (SEA) y Vizcaya (Cebek).

La polémica surgió a comienzos de mayo cuando Adegi hizo público el nombre de Lazpiur sin comunicarlo ni consensuarlo previamente al resto de asociaciones provinciales, que se quejaron de haberse enterado de la noticia por la prensa. La dirección de Adegi lo designó guiado por un pacto no escrito según el cual la presidencia de la confederal se asigna de forma rotatoria entre las tres patronales. Nacido en Bergara, Miguel Lazpiur, es vicepresidente de Adegi y director general de Construcciones Mecánicas José Lazpiur, empresa radicada en esa localidad y dedicada a la fabricación de maquinaria especial y utillajes. Será elegido presidente de Confebask en el consejo general que la organización celebrará en la primera quincena de julio.

Echeverría, manifestó que Lazpiur será "el segundo empresario guipuzcoano que dirigirá de Confebask". Su primer presidente, José María Vizcaíno, recientemente fallecido, recibió ayer el homenaje de los patronos de Guipúzcoa. Echeverría elogió la "incondicional entrega, abnegada dedicación y compromiso institucional [de Vizcaíno] en un momento de soledad, incomprensión y hasta rechazo de la figura del empresario".En el transcurso de la asamblea, se abordaron diversos asuntos de actualidad, entre los que Echeverría destacó "el deterioro grave del clima y la estabilidad social en las empresas" como consecuencia de "la continuación de la estrategia de confrontación desarrollada por el sindicato ELA". Recordó los 37 días de huelga en el sector de la construcción en 2004 y la "práctica imposibilidad de alcanzar acuerdos en otros sectores de comercio y servicios, que afectan a más de 30.000 trabajadores guipuzcoanos".

En este ámbito, los empresarios volvieron a reclamar la creación de un "contrato estable" como fórmula para reducir "las altas tasas de temporalidad" que frenan el desarrollo competitivo de las empresas. Este contrato tendría duración "indefinida", pero podría ser rescindido por la empresas si concurren "causas objetivas" a cambio de una indemnización más reducida que la vigente.

La asamblea de Adegi también expresó su "preocupación" por las "implicaciones económicas" que pudieran derivarse "por la falta de confianza y la aparente falta de rumbo de todo el proceso europeo" tras la negativa en referéndum de Francia y Holanda al Tratado constitucional de la UE.

El máximo responsable de Adegi eludió referirse expresamente a la intensificación de la campaña de extorsión por parte de ETA a los empresarios para que cedan al chantaje y paguen el dinero exigido, aunque agradeció a la Diputación de Guipúzcoa su apoyo tras los atentados sufridos por varias empresas.

Por otro lado, la patronal dio a conocer los resultados de una encuesta realizada a 71 empresas que implican a 22.000 trabajadores. Según esta consulta, las compañías no ven signos de reactivación económica, aunque pronostican un ligero incremento de la facturación, un empeoramiento de la cartera de pedidos y un moderado empeoramiento de los mercados.