Atractivo turístico

El Ayuntamiento de Chiclana ha logrado recuperar una actividad que sustentó en el pasado buena parte de la economía local, sobre todo cuando los empresarios japoneses comenzaron a comprar a mansalva y a buen precio los atunes. La almadraba permitirá diversificar aún más la pujante economía de Chiclana, según ha subrayado el alcalde chiclanero, José María Román. "Culminamos muchos años de gestión que dan ahora sus frutos", afirmó este Román, quien puso especial énfasis en que Chiclana "recupera una tradición histórica" y suma un nuevo aliciente a su "rica oferta turística".

Con todo, esta actuación no camina sola. Al mismo tiempo, dos proyectos cabalgan para transformar esta zona. Después de años de reclamaciones, el Ministerio de Medio Ambiente ha decidido rehabilitar integralmente el castillo de Sancti Petri, una fortaleza que data del siglo XII y que se asienta sobre un templo construido por los fenicios en recuerdo a Hércules. El Ayuntamiento chiclanero ha mostrado en reiteradas ocasiones su "satisfacción y alegría" por una obra "imprescindible" para evitar que continúe el progresivo deterioro de un monumento histórico y que tendrá "importantes repercusiones turísticas y económicas en la Bahía de Cádiz".

Este castillo, del que aún se conservan algunos torreones y lienzos de muralla, se levanta sobre la mítica isla de Sacti Petri, situada entre las costas de Chiclana y San Fernando. En este enclave histórico se fundó el embrión de Gadir en el siglo X antes de Cristo cuando los fenicios construyeron el antiguo templo Melckart dedicado a Hércules. Fue el templo más famoso de Hispania y fue visitado por personajes como Aníbal o Julio César. Los musulmanes lo derribaron porque creían que estaba lleno de tesoros.

El tercer proyecto paralelo es levantar sobre el poblado de pescadores de Sancti Petri un gran complejo de ocio, cultural, turístico y de deportes náuticos, aunque esta idea aún está en una fase más primitiva.