_
_
_
_
Reportaje:

Róbale el móvil a tu competencia

Las compañías entran en una guerra comercial por arrebatarse clientes entre sí

Ramón Muñoz

En un mercado con casi más móviles que habitantes, las compañías apenas tienen nuevos usuarios que captar, por lo que la batalla comercial se centra ahora en arrebatarle los clientes a la competencia y en procurar conservar los propios. Cuatro millones y medio de españoles han cambiado ya de compañía conservando el número. Descuentos agresivos y regalo de terminales han disparado los gastos comerciales hasta un 70%.

Captar un cliente de una empresa rival cuesta, como mínimo, 150 euros, incluyendo el coste del cambio de terminal

Se llama portabilidad, y es un procedimiento legal que permite a cualquier abonado cambiarse de compañía de móvil conservando el número de teléfono. Se reguló hace poco más de cuatro años con el fin de impedir a las compañías que tuvieran prisioneros a sus abonados por la molestia del cambio de número. Nadie pensó entonces que ese mecanismo iba a ser la clave de la batalla comercial más encarnizada no sólo del sector de las telecomunicaciones, sino del conjunto de los servicios.

Desde que se instauró la portabilidad, cuatro millones y medio de españoles han hecho uso de facilidad y sólo en lo que va de año un millón de usuarios han optado por cambiar de operador de móvil, más del doble de lo que lo hicieron en el mismo periodo del año anterior. ¿Quién ha ganado la batalla? Todos y ninguno o, en todo caso, el consumidor que, merced a la competencia, ha visto cómo bajaban los precios y, sobre todo, tiene mejores terminales.

Y es que hay cifras para contentar a todos. Si se atiende al acumulado histórico, Vodafone es la campeona de la portabilidad porque ha logrado un saldo neto (clientes arrebatados menos clientes perdidos) de 382.948, mientras que el gran perdedor es Amena, que tiene un saldo negativo de 424.776. Movistar se queda en segundo plano con un saldo positivo de 174.463 a cierre de marzo.

Ahora bien, si vamos a una fotografía más reciente, por ejemplo, la del primer trimestre del año, Vodafone afianza su liderazgo arrebatando 181.903 clientes netos; Amena recupera terreno (27.659) y Movistar pierde los 201.334 que ganan sus rivales.

La segunda cara de la portabilidad es su rentabilidad. El esfuerzo financiero que deben hacer las operadoras es creciente. Baste decir que robarle un cliente a la competencia cuesta, como mínimo, 150 euros.

Por eso a Vodafone su liderazgo le ha costado caro: en su último ejercicio fiscal (de marzo de 2004 a marzo de 2005) disparó sus costes de adquisición de clientes un 71% y un 27% los de retención. En total, 611 millones de euros, un 12,7% del total de sus ingresos. Telefónica Móviles, la gran perdedora de la portabilidad en 2004 pero la que más clientes tiene que defender, se gastó por los mismos conceptos 704 millones, el 8,6% de sus ingresos (ahora ya se gasta el 9,8%). Amena no hace públicos estos datos.

Ese esfuerzo tuvo un reflejo sobre la rentabilidad medida en margen sobre Ebitda (resultado bruto operativo). El de Vodafone cayó desde el 36,3% al 34,7%, mientras que el de Móviles pasó del 52,6% al 51,3% (49,9% a finales de marzo para homogeneizarlo con el ejercicio fiscal de su rival). Por eso, en este capítulo, Amena se arroga el liderazgo: fue el único operador que mejoró sus datos, al pasar del 29% de margen en 2003 al 32% de finales de 2004.

Pero ¿cuáles son realmente las causas para que miles de clientes cambien de compañía cada mes? A primera vista, se podría pensar que la búsqueda de tarifas más baratas. Pero no es así. En el 80% de los casos, es la renovación del terminal a bajo precio lo que impulsa al cliente a dejar a su operadora. Dos datos significativos de este fenómeno, casi único en Europa: sólo Telefónica Móviles canjeó 3,6 millones de terminales en 2004 para retener o captar usuarios, y las tres operadoras gastaron más de mil millones de euros en subvencionar el precio de los móviles.

Las políticas de portabilidad no difieren mucho entre operadoras. Javier Foncillas, director de marketing de Vodafone España, señala que su estrategia para retener un cliente se basa en una política proactiva, revisándole los planes de tarifas y ofreciéndole descuentos y renovación de terminales antes de que lo haga la competencia. "Lo más vulnerable es un cliente con tarifas antiguas. Si llegas después de que le ofrezcan una buena oferta, tienes casi todo perdido". Foncillas, que cree que la mejora de la atención al cliente también ha sido clave en su liderazgo, señala también como objetivo las grandes cuentas, hasta ahora casi un monopolio de Telefónica y, en particular, las multinacionales que trabajan en España.

Desde Telefónica Móviles se defienden. Reconocen el reguero de clientes perdidos, pero minimizan el efecto. "El 80% de lo que hemos perdido corresponden a clientes de prepago. Tanto en empresas como en clientes de contrato tenemos un saldo positivo", dice un responsable comercial que prefiere no ser identificado. Telefónica dice que su política ha cambiado: "No vamos a abandonar el prepago, porque son el 50% de nuestros clientes, pero tampoco seremos los más agresivos en captación de los clientes sin contrato", señala el directivo.

Además, dice que se ha observado un "efecto perverso" que les beneficia: los clientes que se van por un terminal descubren que su factura crece porque, al ser las llamadas entre clientes de la misma compañía más baratas (llamadas onnet) y tener Movistar más clientes, se les dispara el gasto y retornan.

Amena, que ha registrado una mejoría notable en la captación de portabilidad en los últimos meses (en mayo consiguió un saldo neto positivo de 6.964 clientes), quiere quitarse el sambenito de que va a por los usuarios con menor consumo. "Durante el primer trimestre del presente año, la portabilidad ha generado unos ingresos netos de 1.270.000 euros. Amena no ha seguido una estrategia indiscriminada de portabilidad, sino que ha conseguido captar clientes de valor, ubicados fundamentalmente en el segmento de pospago. Prueba de ello es que en el periodo comprendido entre enero de 2002 a diciembre de 2004 ha aumentado sus clientes de pospago en casi diez puntos porcentuales, pasando de un 36,9% a un 46% de su base total de clientes", dice José María Cantero, director de marketing de Amena.

Visitantes de la feria de las telecomunicaciones Cebit en Nueva York.
Visitantes de la feria de las telecomunicaciones Cebit en Nueva York.

Nuevos terminales envueltos en planes de descuento

Si hay un mercado rentable para los fabricantes de terminales, es España. Las compañías diseñan sus planes en torno a los modelos de terminales que están dispuestos a regalar a sus clientes. La exigencia es que se mantengan en la compañía un periodo de entre 12 y 15 meses para poder amortizar el regalo.

De hecho, y como señaló recientemente el presidente de la Comisión del Mercado de las Telecomunicaciones, Reinaldo Rodríguez, la competencia entre compañías se centra demasiado en la subvención del terminal en lugar de hacerlo en la reducción de tarifas.

Ahora bien, mientras que para el cliente residencial se trata de planes y ofertas estándar, en el caso de las pequeñas y medianas empresas (pymes) el distribuidor tiene mucho más margen de libertad para ofrecer descuentos, que en muchos casos llegan al 40%. La batalla se libra en el puerta a puerta con un ejército de comerciales recorriendo los polígonos industriales y las zonas comerciales en busca del cliente.

Casi todas las ofertas, además del catálogo de terminales exclusivos, suelen ofrecer llamadas casi gratuitas para llamadas internas entre empleados, amplios descuentos para llamadas a números de la compañía y una gran variedad de tarifas planas siempre que se garantice un consumo mínimo.

La variedad de planes es casi ilimitada para los clientes residenciales. Para profesionales, pymes y autónomos también hay algunos pocos. Vodafone cuenta con planes como Red Empresas, Universales, GSM Pro, Módulo Tarifa Plana y Contratos Autónomos 10. Amena tiene el Contrato Libre Empresas, la Tarifa Sin Límites, Solución 10 y el Contrato Negocio. Telefónica Móviles tiene Plan Autónomos, Plan Empresa y Plus Planes.

Pese a esta encarnizada guerra, todas las compañías están de acuerdo en una cosa: hay sufiente competencia; no hace falta que el Gobierno la fuerce aún más.

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Sobre la firma

Ramón Muñoz
Es periodista de la sección de Economía, especializado en Telecomunicaciones y Transporte. Ha desarrollado su carrera en varios medios como Europa Press, El Mundo y ahora EL PAÍS. Es también autor del libro 'España, destino Tercer Mundo'.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_