Un abanico de últimas voluntades

Las posibilidades de elección a la hora de declarar las últimas voluntades incorpora novedades año tras año. Y Funermostra, la Feria Internacional de Productos y Servicios Funerarios, presenta el abanico más amplio y más actualizado desde ayer hasta el sábado en un pabellón de la Feria de Valencia.

Un total de 185 expositores, un tercio de ellos extranjeros, compiten por la atención personalizada y el servicio integral que requieren los deudos de los difuntos cuando llega la última hora.

Féretros de diversas calidades y detalles sobre su proceso de fabricación; lápidas y explicaciones sobre los más variados sistemas de grabación, rotulación o incorporación cerámica de las fotografías de los difuntos correspondientes; y ofertas de parcelas en jardines de ensueño reclaman la atención del visitante.

Entre las novedades de la presente edición de Funermostra destacan las urnas biodegradables diseñadas por dos técnicos catalanes y elaboradas en los talleres productivos de los centros penitenciarios de Cataluña. La urna Bios ofrece dos versiones. La primera combina las cenizas del difunto con la semilla de un árbol que adornará el jardín donde se depositen. Otra posibilidad es la denominada urna Ecoburn, cuya virtud es su capacidad para disolverse en apenas 24 horas si es arrojada al mar y en tres meses si es enterrada bajo tierra.

La incorporación de las nuevas tecnologías en los servicios y productos mortuorios se aprecia, esencialmente, en las técnicas de grabado de lápidas. Pero otros servicios auxiliares pueden tener futuro.

Uno de los expositores presentes en Funermostra presenta un portal de internet destinado a la publicación de esquelas y a la recepción y gestión virtual de los pésames. A lo largo de 2004, la prensa española destinó 25.264 páginas a recoger esquelas, según los datos que baraja la empresa. La red de internet ofrece una alternativa al papel y garantiza la comunicación a parientes lejanos a través del correo electrónico.