El Estatuto valenciano consagra las relaciones con el Arco Mediterráneo
La reforma prima la cooperación con Cataluña, Baleares y Murcia
El pacto para reformar el Estatuto de la Comunidad Valenciana incluye la necesidad de primar las relaciones con las autonomías vecinas que conforman el Arco Mediterráneo. La apuesta estratégica formulada en la reforma estatutaria se produce después de que el Gobierno valenciano de Francisco Camps, del PP, se enfrentase duramente con el tripartito catalán por la derogación del trasvase del Ebro y su proyecto de eurorregión mediterránea.
"La Generalitat mantendrá especial relación de cooperación con las comunidades autónomas vecinas que se incluyan en el Arco Mediterráneo de la Unión Europea", señala el artículo 59.4 de la reforma del Estatuto de la Comunidad Valenciana que ayer inició su tramitación con su entrada en el registro del Parlamento autónomo.
La apuesta por estrechar las relaciones con las comunidades vecinas del Arco Mediterráneo se produce tras el duro enfrentamiento mantenido con el Gobierno del socialista Pasqual Maragall por la derogación del trasvase del Ebro, el proyecto para impulsar una eurorregión mediterránea -a la que se han incorporado Baleares, Aragón y las francesas Midi-Pyrénées y Languedoc-Roussillon- que Camps rechaza abiertamente y la negativa a que haya una única denominación para el catalán y el valenciano fuera de España.
Camps ya impulsó hace meses la convocatoria en Murcia de una cumbre de presidentes autonómicos del Arco Mediterráneo, que está pendiente de celebración por las tensas relaciones que mantiene el Gobierno valenciano con el catalán. A esta cumbre están convocados también el balear Jaume Matas y el andaluz Manuel Chaves, además de Maragall y los anfitriones, Camps y el murciano Ramón Luis Valcárcel.
La reforma del Estatuto también ha incluido un nuevo artículo en que "se garantiza el derecho de la Comunidad Valenciana a disponer de abastecimiento suficiente de agua de calidad" y en el que "se reconoce el derecho a la redistribución de los sobrantes de agua de cuencas excedentarias atendiendo a criterios de sostenibilidad". Una reivindicación incluida en la reforma estatutaria a instancias de Camps para reforzar su posición en demanda del trasvase del Ebro.
El secretario del Partido Socialista del País Valenciano (PSPV-PSOE), Joan Ignasi Pla, aprovechó ayer para instar al PP a que traslade "el espíritu del pacto del Estatuto de Autonomía" al debate del agua y abandone su posición "victimista".
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