Rajoy acusa al Gobierno de bajarse los pantalones ante el líder de ERC

El presidente del Partido Popular, Mariano Rajoy, acusó ayer al Gobierno central de bajarse los pantalones por acceder a retirar una cinta con la bandera española en una ofrenda floral realizada en Israel por el dirigente de Esquerra Republicana de Catalunya (ERC), Josep Lluís Carod Rovira, y el presidente de la Generalitat de Cataluña, Pasqual Maragall (PSC). "No estaré con el Gobierno que se baja los pantalones y retira la bandera de España porque lo pide Carod Rovira", aseguró Rajoy en un mitin organizado en Valencia para celebrar los dos años de gobierno de Francisco Camps (PP).

"No estaremos con ese señor que se burla de las creencias de millones de españoles, ni tampoco con quien le baila el agua y le hace una fotografía para hacerse el chistoso [Maragall fotografió en Jerusalén a Carod Rovira con una corona de espinas sobre la cabeza en medio de bromas] y tampoco con Zapatero, que se calla y no defiende el sentir de los españoles cuando pasan estas cosas", sentenció el líder del PP. "Este es el único país de Europa donde tenemos que hacer algo tan obvio como defender la bandera", remachó el máximo dirigente del PP.

Rajoy criticó con dureza al presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, por sus acuerdos con los nacionalistas, especialmente con el partido de Carod Rovira. "Yo nunca estaré con la política de quien pacta para que se deje de matar en una parte del territorio de España", dijo el líder popular en referencia al contacto que tuvo el dirigente de ERC en Perpiñán con miembros de ETA hace dos años.

[El secretario general de Esquerra Republicana y portavoz en el Congreso, Joan Puigcercós, calificó ayer en Lleida de "anécdota" y "broma desafortunada" que Carod Rovira posara con una corona de espinas, pero lamentó que ello haya dado pie a "un linchamiento y un ensañamiento fuera de lugar"].

Mariano Rajoy reiteró en Valencia que "el Gobierno ha roto el acuerdo contra el terrorismo y ha intentado engañar a los españoles". En su intervención, insistió en que el PP "no va a cambiar de criterio" y que lo que pase será responsabilidad sólo del Gobierno.

Con el Palau de la Música abarrotado de cargos públicos y militantes populares, Rajoy criticó con dureza el incidente diplomático registrado en Cuba al impedir las autoridades de ese país la presencia de políticos europeos y periodistas en un congreso de disidentes cubanos. El líder popular acusó a Rodríguez Zapatero de "compadrear" y hacerse "amigo de dos dictadores bananeros", el cubano Fidel Castro y el venezolano Hugo Chávez, en vez de defender los intereses de los españoles.