Batallas para fabular

Pocos españoles son aquellos que no cuentan alguna historia de la Guerra Civil referida a sus antepasados que no concluya con un "las peripecias de mi abuelo darían para escribir una novela". Pues bien, muchos escritores se han sentido fascinados a relatar algún episodio, a veces en la frontera entre la realidad y la ficción. En ocasiones parece que se trata de una moda, pero se ha demostrado que la Guerra Civil como material literario no es algo efímero, sino una cantera inagotable de historias, un filón que se ha extendido al cine.

Buena prueba de ello es que las generaciones más jóvenes, que ya no vivieron por supuesto la Guerra Civil, ni siquiera sus secuelas, han fabulado sobre la época. Dos ejemplos son Isaac Rosa con El vano ayer (Seix Barral), ponderado por toda la crítica, y Enterrar a los muertos, de Ignacio Martínez de Pisón, en el mismo sello editorial. Esta última narración aborda la represión en el bando republicano a partir del asesinato de José Robles, el traductor al español del novelista norteamericano John Dos Passos. Otros autores de las nuevas generaciones también se han ocupado del tema. Jesús Ferrero optó por novelar uno de los sucesos más estremecedores de la primera posguerra al recrear la ejecución de 13 jovencitas en Madrid. Se trata de Las trece rosas, publicada por Siruela. En La voz dormida (Alfaguara), de la desaparecida Dulce Chacón, un coro de mujeres toma el protagonismo desde la cárcel madrileña de las Ventas para describir las miserias físicas y morales de la época.

Y hablando de perdedores nos encontramos con una joya que había permanecido inédita hasta hoy, pese a haber sido escrita en 1960. En Los vencidos, publicado por la editorial Gadir, Antonio Ferres une valor literario y crónica sentimental para dibujar un mosaico de un país y de un estado de ánimo. Entre la realidad y la imaginación se mueve el librero-escritor catalán Antonio Rabinad en El hacedor de páginas. Rabinad ambienta su obra en la Barcelona de la guerra y fabula sobre la experiencia del pasado. La brutalidad tanto del frente bélico como de la retaguardia supone el eje sobre el que gira Incierta gloria, de Joan Sales, que para muchos críticos se cuenta entre las mejores novelas sobre la Guerra Civil.