Lisboa estudia anular los permisos para las centrales eléctricas

El nuevo Gobierno portugués, encabezado por el socialista José Sócrates, deberá declarar nulas las licencias para construcción de nuevas centrales eléctricas de ciclo combinado atribuidas por el Ejecutivo anterior, en febrero pasado, a las lusas Galp, EDP y Tejo Energía, y a las españolas Iberdrola y Endesa. El Ejecutivo de Lisboa considera que el proceso no fue transparente y legal, porque los criterios definidos para atribución de las licencias no respetan lo estipulado en la ley lusa y, por otra parte, fueron establecidos ya después de presentadas las propuestas de las empresas ante el ministerio.

El nuevo titular de Economía, Manuel Pinho, solicitó pareceres jurídicos a dos expertos que coincidieron en afirmar que el concurso para la instalación de nuevas centrales para producir electricidad con gas natural no respetaron los principios de "imparcialidad e igualdad" y que el anterior Gobierno "violó el principio de la transparencia de las decisiones", de "no discriminación" y de "justicia".

Galp, Iberdrola y Gas Natural habían contestado la atribución de las licencias, presentando un recurso ante el ministerio. Las dos primeras protestaban porque sólo habían conseguido la mitad de potencia solicitada, mientras Gas Natural se quejaba por haber sido la única empresa excluida. EDP fue la segunda empresa que más centrales ganó (800 megavatios de capacidad de producción en un total de 2800 megavatios) y Tejo Energía vio confirmada su solicitud para una central con 940 megavatios.

El ministerio estima que puede existir, además, un conflicto de intereses en el proceso, porque el ex ministro de Economía Álvaro Barreto adjudicó una licencia a Tejo Energía, una empresa de que fue administrador antes de llegar al Gobierno y a la cual volvió tras dejar sus funciones gubernamentales. Por fin, la decisión fue tomada sólo 10 días antes de las elecciones legislativas de 20 de febrero, cuando el Ejecutivo anterior era sólo un "gobierno en funciones", sin plenos poderes ejecutivos.

Según el Diario Económico, la probable anulación del proceso corresponde también al deseo de Manuel Pinho de que Galp compita en el mercado del gas y electricidad con EDP.