Nueve alcaldes y las Juntas vizcaínas apoyan a la plantilla de Babcock
La dirección de la empresa aguarda todavía la respuesta del comité a su oferta de acuerdo
Los nueve alcaldes de la Margen Izquierda y la Zona Minera de Vizcaya reclamaron ayer al Gobierno central la salida de la empresa austríaca ATB de Babcock como única forma de mantener la compañía. En una declaración institucional conjunta, los ediles critican los "constantes incumplimientos" de ATB y piden que la SEPI (Sociedad Estatal de Participaciones Industriales) garantice un nuevo proyecto industrial. La dirección de Babcock señaló que sigue a la espera de que el comité responda a su oferta de acuerdo si se desconvoca la huelga indefinida.
La crisis de una de las últimas grandes empresas de la Margen Izquierda movilizó ayer a los alcaldes de Barakaldo, Portugalete, Santurtzi y Trapagaran, todos del PSE, y los de Sestao, Ortuella, Abanto, Muskiz y Zierbena, del PNV. En un acto conjunto con el comité de empresa celebrado en Barakaldo, los primeros ediles presentaron una declaración en la que alertan del "riesgo de desaparición a corto plazo" de Babcock.
El manifiesto apoya las reivindicaciones de los trabajadores, tanto sobre los despidos como en lo que respecta a la "nefasta gestión" de ATB. A renglón seguido, reclama al Gobierno central que "ponga el punto y final" a este proyecto "fracasado". Instan a la SEPI a que, ante los "constantes incumplimientos" de la empresa austríaca sobre el reflotamiento de la firma de bienes de equipo, garantice un nuevo proyecto industrial para Babcock y "asuma su responsabilidad de una vez por todas" para evitar el cierre. El documento será remitido tanto a la presidencia del Gobierno central y a la SEPI como al Ejecutivo vasco.
La privatización de la compañía, que desde 1977 era propiedad del Estado, y su paso a ATB incluía una tutela del proceso por la SEPI hasta el próximo año. El organismo estatal no puede, por las exigencias de la Unión Europea, volver a hacerse cargo de Babcock.
El presidente del comité de empresa, Alfredo Laureiro, pidió ayer a las dos administraciones que "asuman la responsabilidad que les corresponde a cada uno". Aseguró que los actuales propietarios "han fracasado igual que los alemanes", anteriores dueños de la firma, y lamentó que los trabajadores lleven ocho años "permanentemente en un estado de incertidumbre".
Mientras, la dirección de Babcock indicó que sigue "a la espera" de que el comité responda a su oferta de readmitir al director financiero despedido -el desencadenante del actual conflicto- y mantener los contratos tres meses si se desconvoca la huelga, iniciada el 28 de abril. Pese a la insistencia de la dirección en que la propuesta se ha trasladado al comité, Laureiro sostuvo que a primera hora de la tarde de ayer no la conocían "oficialmente" y mantendrán las movilizaciones.
Este conflicto llegó ayer también a las Juntas Generales de Vizcaya, que por unanimidad aprobaron una propuesta de PNV-EA de apoyo a Babcock. El texto insta a la SEPI a que garantice la viabilidad de la empresa de bienes de equipo y se forme una comisión con los sindicatos, el organismo estatal, el Gobierno vasco y ATB.
