La Generalitat se declara contraria a soterrar la línea de Bescanó porque provocaría fallos de funcionamiento

La Generalitat es contraria a soterrar la línea eléctrica de alta tensión entre Bescanó y Figueres. Así lo afirmó ayer el consejero de Trabajo e Industria, Josep Maria Rañé, "porque no es posible técnicamente". Según el consejero, "colocar dentro de una zanja un cable de alta tensión comporta unas pérdidas energéticas y una serie de deficiencias en el funcionamiento que no hacen posible esta solución".

Rañé admitió que la única posibilidad para no tener que instalar la línea en un trazado aéreo "sería construir una galería de servicios, es decir, un túnel con ventilaciones que permitan que el calor que desprende la corriente cuando circula no se condense y altere el entorno". Sin embargo, dejó claro que "esta posibilidad es carísima y de difícil sostenimiento".

El consejero reconoció que este tipo de túneles "se utilizan en tramos cortos, pero no en trazados tan importantes" como el de Bescanó".

ICV-EUiA se ha declarado contraria a la línea, pero en cambio estaría dispuesta a aceptarla en último extremo si se soterrase. Por su parte, varios alcaldes de la zona también se oponen a ella.

El consejero de Trabajo e Industria defendió la necesidad que la línea sea de 400.000 voltios y explicó que aunque "sería factible transformar en las subestaciones de Bescanó y el Baix Empordà la potencia de la misma y transportarla en una línea de 200.000 voltios, se perdería energía, se producirían oscilaciones y, por lo tanto, no se garantizaría la potencia punta que necesita el AVE para ir a la velocidad prevista". Rañé, que ayer a mediodía clausuró en Girona la tercera sesión del congreso de la pyme catalana, reiteró que el plan de la energía de Cataluña estará a punto a mediados de mayo. Durante la jornada, los empresarios defendieron la necesidad de la línea y de que se ejecute de forma urgente.

Por su parte, la Cámara de Comercio de Girona ha incluido en un lugar destacado de su decálogo de prioridades para Girona, que presentó al primer consejero, Josep Bargalló, la demanda de construcción de la línea de alta tensión entre Bescanó y Francia. "Se considera que es una de las iniciativas prioritarias de desarrollo económico y social, no sólo de nuestro país, sino de Europa", aseguró la entidad. El documento añade que dicha línea "no puede ser obstaculizada por debates excesivamente largos y poco clarificadores para el empresariado y el conjunto de la ciudadanía".

El Colegio de Ingenieros Industriales también defiende la línea. "Es la solución que se apunta como más adecuada para alimentar el AVE hasta la frontera y garantizar las necesidades actuales y futuras de las comarcas gerundenses", dijo el colegio en un comunicado. La entidad señala que la imposibilidad de atender el aumento de la demanda de suministro eléctrico en las comarcas de Girona impide actualmente alcanzar los criterios de seguridad en el suministro, "un problema que se puede agravar al llegar la línea de alta velocidad, ya que su suministro genera diversos inconvenientes en la zona".

El Colegio de Ingenieros Industriales ha recomendado al Gobierno autónomo y al central "no precipitarse en la toma de decisiones y debatir a fondo este tema, que es trascendental para Cataluña". Esta institución colegial ha recordado que los problemas más importantes que resolver son "la falta de capacidad para atender el crecimiento del mercado en las comarcas gerundenses, el refuerzo de la interconexión del sistema eléctrico peninsular con el sistema francés, la insuficiente garantía de servicio a los usuarios actuales y la alimentación del AVE hasta la frontera".