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Reportaje:

Tiempo de querellas en la Zona Franca de Cádiz

La Abogacía del Estado se dispone a actuar en los tribunales contra "cualquier persona" implicada en las malversaciones

Las irregularidades económicas detectadas en la Zona Franca de Cádiz, que empezaron a conocerse hace cuatro años, durante el mandato del PP, llegarán por fin a los tribunales. El pleno del recinto fiscal, dependiente del Ministerio de Hacienda, ha ordenado a la Abogacía del Estado la presentación de querellas contra "quienes estén implicados" en los presuntos delitos detectados hasta ahora: fraude, malversación, apropiación indebida y prevaricación.

La primera acción judicial va contra los responsables de la empresa Quality Food, una sociedad propiedad de la Zona Franca a la que se investiga por un supuesto "quebranto" de 30 millones de euros, según ha denunciado el actual delegado de este organismo, el socialista José de Mier. Las irregularidades detectadas fueron ratificadas por informes del Tribunal de Cuentas, la Abogacía y la Intervención General del Estado.

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De Mier señala que sus dos antecesores, los populares Miguel Osuna y Manuel Rodríguez de Castro, podrían estar implicados. "En ninguno de los informes se exime a los dos ex delegados de responsabilidad. Si la situación es claramente rara e irregular y ha producido un quebranto, es lógico que no se exima de responsabilidad a quienes han dirigido esta casa durante dos periodos", dijo De Mier.

La primera querella segura se dirige contra el empresario Manuel García Gallardo, ex militante del PP y responsable de Quality Food. En su gestión, los abogados del Estado apreciaron presuntos delitos de fraude y apropiación indebida.

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El abogado del Estado José Ignacio Monedero tiene encomendada la presentación de la querella sobre esta última sociedad, dedicada a los servicios de alimentación y catering. Pero García Gallardo no será el único, según el actual delegado. "Estarán los que tengan que estar. No quiero decir ningún nombre. La demanda no será en ningún caso contra una persona, sino por una relación de delitos donde seguro que habrá más de una persona y más de dos", ha afirmado De Mier.

La actual dirección de la Zona Franca también atribuye a Rilco, otra empresa de la Zona Franca, la pérdida de 15 millones de euros que el recinto fiscal pagó entre 2000 y 2001 a Miami Free Zone y Telvent Interactiva por un material informático para crear una red de comercio digital. Esta plataforma nunca llegó a funcionar y, según un estudio encargado por el Consorcio, el material contratado tiene un precio que apenas alcanza dos millones de euros.

La querella contra los responsables de esta sociedad se presentará antes del mes de junio.

Durante la puesta en marcha de Rilco, el entonces delegado de la Zona Franca, Rodríguez de Castro, realizó numerosos viajes por países iberoamericanos y gastos que no justificó, según expuso el Tribunal de Cuentas. Este órgano denunció que este dirigente popular gastó durante su mandato, entre 1997 y 2001, casi 600.000 euros de los fondos de la Zona Franca.

Rodríguez de Castro se vio obligado a presentar su dimisión en febrero de 2001, mes y medio después de que trascendieran las denuncias sobre su gestión, en especial, por 1,33 millones de euros que gastó en viajes, regalos, hoteles, restaurantes y en protocolo. Esta cantidad superó en un millón de euros el presupuesto para estos capítulos, según los informes de control económico y financiero de la Zona Franca.

Tras su dimisión, su sustituto Miguel Osuna mantuvo Rilco, a pesar de sus escasos resultados y de las denuncias sindicales, que acusaron a los populares de "colocar" en esta empresa a numerosas personas vinculadas a dirigentes del PP de Cádiz.

Para De Mier, lo "más grave" de la gestión del PP es que se "manejó" este organismo "como si fuera un cortijo". "Estos señores tienen un concepto empresarial del dinero público. Es un dinero de nadie, no es un dinero de todos. Ni siquiera dinero suyo, porque lo habrían administrado de otra manera", dijo De Mier.

El actual delegado también destacó la responsabilidad de Teófila Martínez, alcaldesa de Cádiz y, por tanto, presidenta de la Zona Franca. Según De Mier, la dirigente popular conoció en 2000 un informe de los directores generales de la Zona Franca sobre los gastos de Rodríguez de Castro. También aludió a una carta que, según reveló el jueves pasado Canal Sur, una ex secretaria del Consejo de Administración de Quality Food envió en 2003 a Martínez y Osuna con advertencias. "Este sapo se lo comen Teófila Martínez, y no yo, y el PP, y no el PSOE", espetó José de Mier.

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