Renault suprime el tercer turno de fabricación del modelo Modus

Unos doscientos trabajadores de Renault no renovarán su contrato a partir del próximo mes de mayo, en tanto que otros 400 deberán ser recolocados por la empresa, que se ha visto obligada a reducir la fabricación del modelo Modus, una de las apuestas más firmes de la compañía francesa. La empresa ha garantizado que el ajuste afectará al empleo temporal y no al fijo, sobre una plantilla total de 4.200.

El dato se esperaba desde hace semanas y fue comunicado ayer a los representantes sindicales, que habían expresado su temor a una reducción de plantilla por no haberse cumplido las expectativas de ventas de este vehículo pensado para distribuirse en 166 países. Para resolver la diferencia entre la oferta y la demanda, la factoría ha decidido eliminar el tercer turno, en el que estaban trabajando alrededor de 600 operarios.

Este coche, fabricado en exclusiva en Valladolid, no ha cubierto las expectativas más optimistas de Renault, que esperaba sacar de la cadena unos 1.400 vehículos cada día, cifra que ha chocado frontalmente con la demanda real, que se sitúa en este momento en 975. Así, las ventas de la joya de la corona de la filial francesa, se quedan muy por debajo de las expectativas de un vehículo en cuya fabricación se invirtieron alrededor de 300 millones de euros y del que se esperaba vender 300.000 unidades cada año. Cuando el ambicioso proyecto fue presentado, Renault anunció su intención de distribuir el mismo en 166 países, cantidad que se ha quedado reducida a 58.

El reajuste de la plantilla se producirá entre finales de mayo y primeros de junio, "con el fin de ajustar la fabricación del nuevo monovolumen de la marca a la demanda actual del mercado", según un comunicado hecho público durante la tarde de ayer. En el mismo, Renault insistió en que este recorte "no tendrá incidencia en el empleo fijo, si bien será necesario un ajuste mínimo en el empleo temporal, que afectará a alrededor de 180 trabajadores".

Los sindicatos valorarán hoy el alcance de la medida, que CGT, en boca de su representante Joaquín González, recibió con "una cierta prudencia" tras escuchar que la empresa ha garantizado "que no corre riesgos la plantilla fija".