La situación económica favorable y la inmigración fomentan la venta de coches

El enfriamiento del mercado europeo de automóviles no llega a España. Las matriculaciones nuevas han subido un 25% entre 1995 y 2003 y llegaron a una cifra récord en 2004: 1,65 millones de turismos y todoterrenos. Los expertos estiman que el mercado español seguirá creciendo e igualará en 2010 las tasas de vehículos por habitante de Alemania, Francia, Italia y reino Unido. Una situación macroeconómica favorable y cambios sociales como la mayor incorporación de la mujer al trabajo y la explosión de la inmigración fomentan la compra de coches.

El índice de automóviles por habitante ha aumentado de forma considerable durante los últimos años, pero aún queda margen para crecer, aseguran los expertos. Con un índice de 470 coches por cada mil habitantes, España sigue por debajo de los 520 automóviles de media en Alemania (541), Francia (491), Italia (582) y el Reino Unido (484), los principales mercados automovilísticos en Europa.

No obstante, está previsto que la venta de coches en España continúe creciendo por encima de la media europea durante los próximos cinco años, para equipararse con el promedio europeo en 2010, asegura Carmen Hernansanz, jefe sectorial del servicio de estudios del BBVA.

Los datos del primer trimestre de 2005, en línea con los del año pasado, sugieren que las ventas de coches nuevos del ejercicio en curso podrían alcanzar el nivel del año pasado. Sin embargo, el portavoz de La Asociación Nacional de Fabricantes de Automóviles (ANFAC) muestra cautela y prevé un ligero descenso en las ventas para el 2005, pero espera "otro año excelente para el sector".

La situación macroeconómica favorable, según el portavoz de ANFAC, es uno de los factores que influyen en la elevada adquisición de automóviles. Un mayor nivel de renta per cápita, el mantenimiento de los tipos de interés en niveles reducidos, el crecimiento del empleo y la confianza de los consumidores son las causas económicas que más han estimulado las ventas.

Algunas tendencias del sector también han contribuido al elevado nivel de ventas. El renting, según ANFAC, creció más de un 10% en 2004. El alquiler a largo plazo gana adeptos y con ello abre el mercado automovilístico a más consumidores. Otra causa ligada al propio sector es "la agresiva oferta de promociones que contienen a los precios", en palabras del portavoz de la ANFAC.

Segundo y tercer coche

Pero no son los únicos factores. La incorporación de la mujer al mercado laboral, aunque no es un fenómeno nuevo, sigue creciendo y provoca que cada vez hay más familias que adquieren un segundo y un tercer automóvil. La inmigración es otra clave que incidirá, sobre todo durante los próximos años, en el consumo de coches. Desde 2002, se han establecido 600.000 extranjeros en España cada año, según el BBVA. A pesar de que su renta es inferior al promedio español, es un grupo especialmente propicio a la adquisición de un automóvil.

La mayoría de los extranjeros que vienen a España no son propietarios de coches, y aunque muchos optan por comprar un vehículo de segunda mano, su adquisición de coches nuevos ya se nota.

El motivo es que hay un periodo de asentamiento en que los inmigrantes tienen que regularizar su situación laboral y establecerse económicamente -que estima Hernansanz oscila entre tres y cinco años- hasta que puedan considerar la compra de un coche nuevo. "El flujo más fuerte de extranjeros empezó en 1999, y por eso el resultado de la inmigración en las cifras de consumo de automóviles se ve ahora", asegura la economista del BBVA.

Otro factor que favorece la compra de un automóvil por parte de la población inmigrante es que tiene una estructura de edades muy diferente a la población nativa, con un mayor peso relativo en los grupos de edad de entre 20 y 44 años, un tramo de edad propicio a la compra de un coche. En este intervalo se acumula el 60% de la población extranjera frente al 40% de origen español.