"No me guío por lo que dice la opinión pública"

"Ésta es mi séptima crisis desde que estoy en política, y probablemente la más importante". Manuel Lamela (Burgos, 1962), Consejero de Sanidad de la Comunidad de Madrid desde 2003, concede esta entrevista dos horas antes de que 10.000 personas se manifestaran pidiendo su dimisión por cómo ha gestionado el caso de las denuncias por supuestas malas prácticas en la sedación aplicada en el servicio de Urgencias del hospital Severo Ochoa de Leganés. Lamela, abogado del Estado, entró en el Partido Popular -"entonces Alianza Popular"- a los 18 años. Su anterior cargo fue el de director de Gabinete de su amigo Rodrigo Rato en el ministerio de Hacienda.

P. Usted, que es abogado, ¿por qué dio crédito a una denuncia anónima, que es ilegal?

"Comprendo que muchas personas tienen muchas ganas de que me marche, pero me temo que van a tener que aguantarme un poquito más"

"Son los médicos del hospital que forman la comisión de mortalidad los que dicen que hay casos irregulares, no yo"

R. No es lo mismo una denuncia anónima de que alguien ha robado, que una denuncia anónima de que alguien está haciendo algo que afecta a la salud de los ciudadanos. Eso es un elemento cualitativo importante.

P. ¿Como para aplicar de manera distinta la ley?

R. Se tiende a no tener en cuenta las denuncias anónimas. Lo que pasa es que esta denuncia por sí misma es constitutiva de delito porque maneja datos que están amparados por la legislación, y por lo tanto nunca podría dejar de ser anónima, porque si el denunciante hubiera puesto sus nombres y apellidos, el primero en ingresar en prisión sería él.

P. Hay quien dice que usted ha dado tanto crédito a la denuncia porque pertenece a grupos conservadores como el Opus Dei o los Legionarios de Cristo. ¿Es cierto?

R. El que le haya dicho eso no me conoce ni en fotografía. Siempre he estado en el sector más liberal del PP. Pero aparte de eso, yo creo que es un error hablar de este tema relacionándolo con cuestiones religiosas. Eso forma parte de ese ánimo de contaminar a la opinión pública y perjudicar la imagen de las personas. Aquí nadie ha discutido nunca que la sedación no sea correcta en las personas terminales, ni que se hace. Estamos en el siglo XXI, afortunadamente, y hay elementos clínicos suficientes para no sufrir en la agonía.

P. ¿Por qué hicieron pública la denuncia?

R. Está constatado que una asociación [de pacientes] publicita el viernes 11 la existencia de la denuncia, la existencia de la remisión a la Fiscalía y el contenido de la denuncia. Por tanto quien pone esto en el ámbito público no es la consejería: es una asociación que a mi juicio ha efectuado una irresponsabilidad.

P. Ese mismo día usted le dijo al secretario de los socialistas madrileños, Rafael Simancas, que había 400 posibles eutanasias.

R. Lo que hice fue hablar con el secretario general de Izquierda Unida en Madrid [Fernando Marín] y el del Partido Socialista y decirles que existía esta denuncia, que estábamos investigando, y que la denuncia decía que podrían existir 400 presuntos casos de homicidio -eso lo dice la denuncia, no lo digo yo-. Y les pedí que hicieran un ejercicio de responsabilidad, que el tema era lo suficientemente complejo para investigarlo de una manera tranquila. Sorprendentemente, pocas horas más tarde salió a los medios de comunicación.

P. ¿Se pueden descartar los homicidios?

R. Eso lo tendrán que decir los expertos que evaluarán las historias, y después lo tendrá que decidir el fiscal.

Yo no tengo más indicios que los que me han dado los profesionales sanitarios, porque yo no soy médico ni aspiro a serlo. Y son los médicos del hospital que forman la comisión de mortalidad los que dicen que hay casos irregulares, no yo. Y son los médicos del hospital los que dicen que esos casos hay que investigarlos, y no yo. Y son algunos médicos del hospital los que no investigan esos casos, y no yo. Y los que no aclaran esos casos, y no yo. Aquí hay una comisión que ha detectado errores y unos se han explicado y otros 25 no se han explicado al día de la fecha, y no ha pasado nada. ¿Por qué? No lo sé. Y no es función del consejero saberlo. ¿Que si son graves o no son graves esas irregularidades? No lo sé, y no es función del consejero saberlo. Eso lo dirán los técnicos y los peritos judiciales. Lo que está claro es que una comisión de profesionales detecta unas irregularidades que no se investigan, y que estas irregularidades pasan a una comisión de seguimiento en la que tampoco se investigan. Son un cúmulo de cuestiones que reflejan de una manera palmaria la irresponsabilidad de los gestores de esas unidades, del presidente de esa comisión, del coordinador de las urgencias y del gerente del hospital que ni se ha enterado o, si se ha enterado, peor todavía.

P. ¿Y qué opina usted que va a salir de la investigación?

R. Yo no tengo una percepción, porque yo no me guío por mi percepción para tomar decisiones. Las sedaciones excesivas, las indebidas y las no practicadas, que también hubo, están escritas en actas. Y si eso está bien hecho, si está mal hecho, si se podía haber hecho mejor o si es algo distinto a una buena praxis no lo va a decidir el consejero, porque no es su responsabilidad. Sí es responsabilidad del consejero que eso no se va a volver a producir. Y eso tenga usted seguro que no se va a volver a producir.

P. ¿Qué datos arroja de momento la investigación?

R. El informe evidencia

un montón de irregularidades importantes y graves administrativas y de vulneración de ley, porque que aparezcan más de 50 consentimientos en un cajón está tipificado en la ley como una infracción muy grave y eso es suficiente para abrir un expediente disciplinario y para sancionar.

P. Hasta ahora sólo se manejan informes antiguos. ¿Por qué no se actuó cuando se hicieron?

R. Eso habría que preguntárselo a los responsables del hospital. El hospital tiene unas instrucciones internas en las que dice que la sedación se hace en la unidad de paliativos, no en urgencias. Y eso no se ha cumplido en ningún caso. Ninguno de los responsables se molesta en cumplir esas instrucciones.

P. ¿Entonces se ha creado esta alarma porque los cuidados paliativos no se dan en la unidad indicada?

R. Mire usted, la alarma la crean primero quienes difunden la denuncia, no la Consejería. Segundo, la alarma la amplían los medios de comunicación que difunden noticias adicionales falsas, comentarios o rumores, como que se está matando a la gente. O justamente lo contrario, que se está maximizando algo que no existe. Me da igual que el mensaje vaya a un lado o vaya a otro, porque los mensajes son igual de contraproducentes e igual de malos para el sistema. Los dos generan alarma. Y de eso no es responsable la consejería. De eso es responsable quien saca la denuncia a los medios. Porque es una alarma interesada para deteriorar, para desgastar y para erosionar al sistema sanitario, a los profesionales y al consejero de Sanidad. Y quizá esto último que he dicho sea el primer objetivo.

P. ¿Se limitan las irregularidades a una cuestión de papeles?

R. Es que no es una cuestión de papeles. La cuestión administrativa supone que un ciudadano que entra en esa unidad no sabe qué le van a hacer y por qué; que no va a constar en su historia clínica; que no vamos a poder saber después qué se hizo y por qué se hizo; que no sabemos si el consentimiento existe o no existe, y si se guarda en un cajón o si se tira a la basura. Hay leyes en España que penalizan que eso no se pueda dar. No banalicemos las irregularidades administrativas, que están tipificadas como graves.

P. La Junta de Personal pide, para restaurar la imagen del hospital, que revoque el cese del coordinador de Urgencias.

R. Eso es un engaño. O hay una irregularidad que genera una responsabilidad y una acción, o no la hay. Y yo no voy a dejar de tomar decisiones por lo que me digan de fuera. Yo no estoy para que me alaben por las decisiones que tomo. A veces uno tiene que tomar decisiones que son muy difíciles, y que sabe que no van a ser entendidas. Yo no me guío al tomar decisiones por lo que dice la opinión pública, y mucho menos por lo que dice el señor Simancas. ¡Hasta ahí podíamos llegar!

P. ¿Qué medidas van a tomar para que vuelva la normalidad?

R. El nuevo gerente está ordenando la unidad de Urgencias, está ordenando lo que va a ser el nuevo equipo de dirección del hospital. Aquí todo se ha hecho de acuerdo con todos y estoy muy orgulloso de ello. Y estoy dispuesto a seguir haciendo todo con todos -si se dejan, porque eso no me va a impedir gobernar-. Nosotros tenemos en marcha desde hace ya un año una mesa de trabajo donde se está trabajando en una redefinición y un impulso de los cuidados paliativos. También le dije al Ministerio de Sanidad que era bueno revisar la Estrategia Nacional de Paliativos para intentar que, en temas tan complejos como estos, hagamos todos lo mismo.

P. Sindicatos, oposición y trabajadores han pedido su dimisión. ¿Qué va a hacer?

R. Yo comprendo que hay muchas personas que tienen muchas ganas de que me marche, pero me temo que van a tener que aguantarme un poquito más.