Los embalajes de los mayoristas de Lavapiés serán recogidos cada dos horas durante el día

El barrio de Lavapiés cuenta desde ayer con un servicio de recogida de embalajes para mayoristas. El Ayuntamiento ha establecido por todo el barrio 30 puntos, cada uno con un horario, en los que los comerciantes deberán apilar sus cartones y envoltorios. Desde las diez de la mañana hasta las 21.45, los responsables de limpieza del Ayuntamiento pasarán cada dos horas para recogerlos. Quienes incumplan el horario o depositen los restos fuera de los espacios previstos podrán ser multados hasta con 30.050 euros, según Medio Ambiente.

"Ya decía yo que algo iba a pasar aquí esta mañana, estaba todo más limpio que nunca", asegura Trinidad, propietaria de un comercio en la calle de Lavapiés. Ayer el barrio recibió la visita de la concejal de Medio Ambiente, Paz González, y el concejal de Economía, Miguel Ángel Villanueva. Fueron a presentar en la plaza de Lavapiés el plan de recogida de embalajes para los mayoristas de la zona, donde se recopilan al día 10 toneladas de cartones.

Hasta ayer el sistema empleado era muy parecido al que pueda haber en cualquier parte: "Los doblabas y apilabas, y cuando pasaba el camión por la calle le hacías una señal y le sacabas los embalajes", explicó Eva Domínguez, presidenta de la asociación de mayoristas de la zona centro. Ahora para tirar los residuos se han establecido 30 puntos diferentes por todo el barrio, cada uno de ellos con un horario concreto en el que pasan los servicios de limpieza.

Sin señalización

En los puntos, situados en medio de la acera, no hay ningún tipo de señalización, ni contenedor. Para que los mayoristas conocieran dónde estaban los lugares de recogida, se envió una carta informando del plan. Además, fuentes del Ayuntamiento aseguraron que varios funcionarios repartieron por los 619 locales a los que afecta la medida en la zona centro fichas informativas con las horas en las que pasa el camión por cada zona y con fotos ubicando el punto exacto para facilitar la tarea a quienes no hablen correctamente el idioma. Los paquetes deberán presentarse plegados, atados y agrupados para que ocupen lo menos posible.

El coche pasará cada dos horas por los 30 espacios desde las diez de la mañana hasta las 21.45, de lunes a viernes y los sábados sólo por la mañana. Los residuos sólo podrán sacarse desde 15 minutos antes de que pase el servicio de limpieza. La edil de Medio Ambiente Paz González destacó ayer que es "esencial" que los comerciantes colaboren para que la medida tenga éxito. Para garantizar que así sea, aseguró que se ha establecido un servicio permanente de inspección y que si se incumplen las normas puede haber sanciones de hasta 30.050 euros. La ordenanza de protección del medio ambiente urbano, en su artículo 131, prohíbe "ensuciar las vías y espacios libres públicos".

La presidenta de la asociación de mayoristas del centro explicó que si la medida tiene éxito, es un gran paso para la imagen pública de la ciudad porque "nos interesa que este barrio, al que vienen a comprar género de toda España y parte de Europa, dé una buena imagen y que no aparezca repleto de embalajes", señaló.

Las quejas de los vecinos han sido habituales por la acumulación masiva de basuras a las puertas de los locales. "Ya era hora de que hicieran algo porque las calles de Tribulete y Sombrerete son imposibles de recorrer, están llenas de porquería, pero no sé yo si esto va a arreglar algo o simplemente van a convertir cada dos horas las aceras en un basurero", se quejaba una vecina.

Paz González anunció que si la medida funciona en este barrio, servirá como ejemplo para ampliarla a otras partes de la ciudad con problemas parecidos, aunque no supo precisar qué partes ni en qué consistirían las medidas a exportar.

El consejero de Economía, Miguel Ángel Villanueva, aprovechó la ocasión para hacer balance del funcionamiento de las primeras medidas que se han puesto en marcha en el plan de acción para mejorar el barrio de Lavapiés. "Hemos puesto más agentes de movilidad, así que los agentes municipales pueden dedicarse con más atención a la seguridad, durante las 24 horas". También informó de que ya han comenzado a realizar las 110 inspecciones sanitarias en lugares de alimentación, y controles de la seguridad contra los incendios.

A algunos vecinos ayer no parecían convencerles estas iniciativas. La dueña de una frutería se lamentaba: "Que se dejen de tanto plan de limpieza y que impidan que se venda hachís en la plaza, que lo están haciendo delante de todos y nadie los detiene".