Bargalló afirma que los "grandes debates" como el de la reforma del Estatut ocultan la acción del Gobierno

El primer consejero de la Generalitat, el republicano Josep Bargalló, aseguró ayer que los "grandes debates" que se mantienen en Cataluña sobre la reforma del Estatut o el nuevo sistema de financiación autonómico, han "tapado" la acción del Gobierno tripartito, sobre todo en política social. "Estos procesos de reforma impiden ver el gobierno del día a día, que igualmente se está llevando a cabo", afirmó.

La conferencia de Bargalló, que tuvo como escenario la Universidad de Barcelona, contó con la asistencia de seis consejeros de la Generalitat y numerosas personalidades. Bargalló aseguró que esta ocultación posibilita las acusaciones de los partidos de la oposición, Convergència i Unió y el Partido Popular, en el sentido de que "el Gobierno no gobierna". Para evitarlo, se comprometió a otorgar una mayor "visualización" a la política "social y cotidiana" del Ejecutivo.

Tal vez con ese objetivo, Bargalló aparcó para el final de su intervención las referencias a los grandes temas. Sobre el Estatut, dijo que no responde a "caprichos identitarios", sino que es una herramienta para "resolver los problemas de la gente". En la conferencia, el primer consejero avanzó además las principales iniciativas que el Ejecutivo prevé llevar a cabo en el 2005 y señaló la "ambición" contenida en el pacto del Tinell -el acuerdo de gobierno entre el PSC, ERC e ICV-EUiA. A su juicio, el pacto "no ha de ser visto como un recetario inconexo ni como una declaración de intenciones", sino como "la concreción de una voluntad de transformación del país". Un "profundo cambio de guión", dijo Bargalló, que ha creado "desconcierto en la oposición y en la opinión pública".

Bargalló destacó la puesta en marcha del Plan Director de Infraestructuras de Telecomunicaciones, que situará a Cataluña, según explicó, entre las cinco regiones europeas más desarrolladas. En el ámbito social y medioambiental, destacó la firma del pacto nacional por la educación y la aprobación de la ley del paisaje.

El primer consejero aprovechó además para referirse a la crisis política en Cataluña, originada a raíz del hundimiento de un túnel del metro en el barrio del barcelonés del Carmel. Bargalló recordó las palabras del líder del PP catalán, Josep Piqué, sobre la ruptura del denominado "oasis catalán", y aseguró que su "hipotética desaparición" no ha de servir para que se importe a Cataluña el estilo "de la crispación y del todo vale", "basado en el insulto y en la descalificación". El consejero rechazó el oasis como sinónimo de "pacto de silencio", pero lo reivindicó, en cambio, si su significado implica una apuesta "por el diálogo y el pactismo".