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Entrevista:VÍCTOR DE DIEGO | Músico de jazz

"El jazz permite experimentar con todo"

Víctor de Diego (Bilbao, 1964) se encargó de abrir el ciclo Bilbao Distrito Jazz al frente del cuarteto que ha grabado Oraindik ametsetan (Errabal), un disco que suma diversas influencias sobre la esencia be-bop y que supone la cuarta entrega "como líder" de un saxofonista que vive en Barcelona desde hace 17 años y que, como músico de sesión, ha tocado junto a Rostropovich, Serrat o Peret.

Pregunta. ¿Ha resultado Oraindik ametsetan el disco que quería escuchar?

Respuesta. En estudio nunca es como te gustaría. Siempre se da por descontado que la música sale un poquito más contenida, no tan extrovertida. Pero éste es seguramente el disco en el cual menos se nota eso. Supongo que algo tiene que ver el que he pasado por estudios la tira de veces.

P. Lo grabó en sólo dos días. ¿En qué invierten tiempo y dinero quienes se pasan meses en el estudio?

R. Son producciones diferentes en que se da mucha más importancia a cuestiones no estrictamente musicales. En cambio, en discos como el nuestro no hay más que la música. La posproducción le da presencia y está muy bien logrado en cuanto a sonido, equilibrio, pero no hay añadidos ni historias raras, que sí hay en otros discos que necesitan más tiempo para elaborarlos mejor.

P. ¿Qué alimenta el estereotipo de que el jazz es monótono?

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R. Es fruto de una falta de información. El jazz es la música que permite mayor grado de mezcla, de improvisación, de riesgo. Hay gente que asocia jazz a Louis Armstrong, y eso es como decir que cine lo asocias a Hitchcock, cuando hay miles de creadores y estilos diferentes, interrelacionados a lo largo del tiempo. En el jazz pasa igual: en el jazz contemporáneo puedes escuchar cosas que te recuerden a Louis Armstrong, pero también a Paco de Lucía, a folclore indio o a ezpatadantza. Es la música que más posibilidades ofrece de búsqueda, la más abierta.

P. ¿Su disco es también variado?

R. Sí, yo nunca pretendo que el jazz sea algo muerto, en el sentido de que sólo voy a hacer be-bop, por ejemplo. El be-bop fue un lenguaje jazzístico muy importante, el pionero del lenguaje jazzístico moderno, pero en mi disco también se oyen ritmos de New Orleans, bossa nova, un toque aflamencado, temas funky, baladas e influencias de músicas contemporáneas. Por eso me gusta el jazz, porque permite experimentar con todo esto.

P. Pasan los años, pasan los discos, y sigue en Barcelona. ¿No mejoran las condiciones en Euskadi?

R. Pues no. Me parece patético que en una ciudad como Bilbao, de casi 400.000 habitantes, sólo interese a unos pocos ir a escuchar conciertos a la Bilbaína, por ejemplo.

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