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Consumo sanciona a 18 empresas de telecomunicaciones con 360.000 euros

Oriol Güell

Las empresas del sector de las telecomunicaciones (telefonía fija y móvil, Internet y empresas auxiliares) fueron las que más reclamaciones recibieron en 2004 por parte de los consumidores de la región. Las 2.314 reclamaciones recibidas por el sector, un 20% sobre un total de 11.322 estudiadas por la Dirección General de Consumo de la Consejería de Sanidad, culminaron con 18 expedientes de sanción por un importe total de 359.178 euros, según datos hechos públicos ayer en la presentación de la Memoria 2004 de Consumo.

Los principales motivos de quejas fueron el cobro de servicios no solicitados, cargar facturas "desorbitadas" o poner obstáculos a la petición de darse de baja del cliente. Las reclamaciones presentadas contra las compañías de telecomunicaciones en 2004 suponen un incremento del 41% respecto a las registradas en el año anterior. Consumo no ofrece, amparándose en lo establecido por la ley, el nombre de las empresas sancionadas.

Los talleres de reparación de vehículos fueron el segundo sector que mayor descontento generó entre sus clientes, con 869 reclamaciones (un 7,67% del total), seguido de la vivienda (865 reclamaciones, 7,64% del total). Este último sector registró el año pasado un descenso del 2,6% respecto a las reclamaciones que recibió en 2003, aunque mantiene el primer puesto en cuanto al importe de las sanciones: 4.390.000 euros sumaron las recibidas por las empresas inmobiliarias.

Los servicios de asistencia técnica y las empresas de transporte de viajeros fueron los otros dos sectores que más reclamaciones recibieron.

Los responsables de Consumo destacaron que en 2004 casi la mitad de las reclamaciones presentadas por los consumidores se solucionaron gracias a la mediación favorable de arbitraje desarrollado por el Gobierno regional. El tiempo medio de solución fue de 106 días y el número de empresas adheridas al sistema ascendió a 14.415, además de 60 asociaciones empresariales y de consumidores.

Sin huevo

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La memoria 2004 de Consumo detalla la labor inspectora realizada por este departamento, en colaboración con los inspectores de los ayuntamientos de la región, en los establecimientos de venta al público, en las empresas de servicios y sobre los productos de venta al público. Los resultados, en algunos casos, no son muy positivos.

De las 17 pastas frescas con huevo analizadas, ocho estaban incorrectamente etiquetadas porque en realidad no contenían ovoalbúmina, la principal proteína del huevo.

Uno de cada cinco prolongadores eléctricos estudiados no eran seguros, un porcentaje que alcanza al 50% de los encendedores o mecheros. Y los tanques de siete de las 273 gasolineras inspeccionadas en la región el año pasado contenían agua mezclada con el carburante.

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Sobre la firma

Oriol Güell
Redactor de temas sanitarios, área a la que ha dedicado la mitad de los más de 20 años que lleva en EL PAÍS. También ha formado parte del equipo de investigación del diario y escribió con Luís Montes el libro ‘El caso Leganés’. Es licenciado en Ciencias Políticas por la Universidad Autónoma de Barcelona y Máster de Periodismo de EL PAÍS.

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