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Entrevista:SVETOZAR MAROVIC | Presidente de Serbia y Montenegro

"Tenemos que pagar nuestras deudas con el pasado"

Guillermo Altares

Puede que el Estado que preside Svetozar Marovic, la Unión de Serbia y Montenegro, heredero de la antigua Yugoslavia, desaparezca el año próximo. Pero mientras se decide el destino de este país, este montenegrino de 50 años, que acudió a Madrid para participar en la Cumbre sobre Terrorismo, quiere profundizar en las reformas democráticas y continuar con su acercamiento a la UE, que pasa por la cooperación plena con el Tribunal Penal Internacional para la antigua Yugoslavia (TPIY), con sede en La Haya. La detención de los líderes político, Radovan Karadzic, y militar, Ratko Mladic, de los serbios de Bosnia durante la guerra es indispensable.

Pregunta. ¿Cuál es el grado de cooperación de Serbia y Montenegro con el TPIY?

Respuesta. Serbia y Montenegro están orientados hacia todas las metas europeas y hacia el cumplimiento de sus responsabilidades con el TPIY. En las últimas semanas, seis generales se han presentado voluntariamente ante el tribunal y dos generales más pueden entregarse en los próximos días. Lo que quedaría pendiente son las obligaciones conjuntas, tanto de Serbia y Montenegro como de Bosnia y Croacia, con respecto a los generales Mladic y Gotovina

[general croata que debe ser entregado por Zagreb], así como a Karadzic. Es un asunto muy importante para nosotros. Son deudas del pasado que debemos pagar para poder entrar al futuro a través de la puerta de Europa.

P. Durante mucho tiempo se ha dicho que el general Mladic estaba en Serbia. ¿Ha cambiado esta situación?

R. Cuando asumí la presidencia de Serbia y Montenegro existía la posibilidad de que el general Mladic estuviese protegido o escondido por las fuerzas armadas del país. Con Karadzic ni siquiera ha habido ese tipo de duda. Ahora, después de dos años en el cargo, le puedo asegurar que nadie en Serbia protege o defiende a Mladic. Hasta el momento en que se presenten en La Haya Karadzic, Mladic y Gotovina, la conciencia de ninguno de nosotros va a estar tranquila.

P. ¿Cuál es la situación política de Serbia y Montenegro?

R. Le puedo asegurar que existe una coincidencia plena y absoluta entre los líderes de Montenegro y Serbia. El año 2006 nos deja la posibilidad de organizar un referéndum de independencia, una posibilidad incluida en el acuerdo de Belgrado, y es un hecho que Montenegro está más orientado que Serbia a aprovecharse de esa posibilidad.

P. ¿Cuál es su posición ante la próxima discusión del estatuto definitivo de Kosovo?

R. La solución para Kosovo no puede ser buscada en el pasado, Kosovo no podrá volver a ser lo que era. Tenemos que buscar una solución para el futuro y ese futuro debe respetar la realidad; pero también acabar con la violencia, crear condiciones de estabilidad y de pleno respeto de los derechos humanos. Kosovo tiene que ser una comunidad multiétnica en la que debe respetarse la voluntad de las mayorías, pero también los derechos de las minorías. En lugar de que Kosovo siga siendo una bomba a punto de estallar en la región, podría convertirse en un ejemplo.

El presidente Svetozar Marovic, el jueves en Madrid.
El presidente Svetozar Marovic, el jueves en Madrid.LUIS MAGÁN

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Sobre la firma

Guillermo Altares
Es redactor jefe de Cultura en EL PAÍS. Ha pasado por las secciones de Internacional, Reportajes e Ideas, viajado como enviado especial a numerosos países –entre ellos Afganistán, Irak y Líbano– y formado parte del equipo de editorialistas. Es autor de ‘Una lección olvidada’, que recibió el premio al mejor ensayo de las librerías de Madrid.

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