El Ayuntamiento cambiará las pruebas de los bomberos para que accedan mujeres
Sólo hay seis féminas en el servicio regional
Los bomberos celebraron el pasado miércoles el día de su patrón, san Juan de Dios. Pero en la capital ninguna mujer pudo sumarse al acto porque en la actualidad sólo hay hombres en el cuerpo municipal de bomberos. En cambio, en el servicio contra incendios de la Comunidad de Madrid trabajan seis mujeres, dos de ellas oficiales. El Ayuntamiento ya planea modificar las pruebas físicas que actualmente imposibilitan el acceso de las mujeres a esta profesión.
Las pruebas de acceso en el Consistorio exigen el mismo nivel a hombres y mujeres, pero además están organizadas de forma que el candidato no sólo compite por superar los mínimos establecidos, sino que se enfrenta a todos los solicitantes de ese año, pues la referencia de puntuación es la marca más alta obtenida de entre todos los que se presentan a la oposición. Es decir, que, aunque el mínimo para correr la prueba de los 100 metros es de 12 segundos, la puntuación máxima la tendrá el que corra en menos tiempo, y a partir de ahí se va calificando el resto de carreras. Esto implica que, aunque haya mujeres que superen las pruebas por sus condiciones físicas, no obtengan plaza, porque las rebasan en puntos los candidatos masculinos. Pero es que además las pruebas potencian la fuerza frente a otras aptitudes, según el director de Emergencias, Alfonso del Álamo, que explicó que su departamento trabaja ya en su modificación.
"Desde hace años, nosotros venimos pidiendo que a las mujeres se les aplique en las pruebas de acceso lo que está regulado por la Federación de Atletismo, que es una reducción de las marcas, como ocurre en todos los países europeos", aseguró el delegado de Comisiones Obreras en el cuerpo, Marcelino Sierra.
Según Sierra, el criterio actual obedece a que la cúpula de los bomberos, que fue destituida fulminantemente en diciembre pasado, "tenía una visión anclada en el pasado" ya que la ausencia de mujeres no es una "postura coherente con la realidad social".
Eso ha hecho que apenas haya mujeres que opten a las oposiciones a bomberos del Ayuntamiento, pues es prácticamente imposible entrar y, en cambio, se preparan para las de la Comunidad, donde tienen otras mujeres como referencia.
Paradójicamente, la primera bombera de toda España aprobó las oposiciones en el Ayuntamiento de Madrid. Fue Esperanza Vicente, aparejadora y oficial de la Policía Municipal, y lo hizo en enero de 1985. Algunos de sus compañeros todavía recuerdan que la apodaron cariñosamente "la Doña". Sin embargo, murió tras una enfermedad. Ella consiguió, además, ser la primera mujer en toda Europa que desempeñó el cargo de oficial en un servicio de extinción de incendios.
Según Sierra, de los 1.500 bomberos con los que cuenta en la actualidad el Ayuntamiento -cuyo sueldo medio ronda los 1.300 euros, incluidos los pluses por peligrosidad o nocturnidad-, unos ochenta bomberos y conductores accedieron en las oposiciones de 2001 y 2002, pues no se han convocado en los últimos tres años, "aunque hay una necesidad acuciante de personal".
Fuera de la necesidad real
El delegado de Comisiones Obreras asegura que el sindicato no está de acuerdo, "en general", con los exámenes de acceso. "Ante la cantidad de gente que se presenta, han subido los niveles de las pruebas físicas para eliminar candidatos. No están encaminadas a elegir a los mejores para el puesto que desempeñarán", afirmó. En la última convocatoria, para 55 plazas, se presentaron alrededor de 1.700 solicitantes, agrega.
Además, considera que se exigen marcas en los exámenes que luego no se piden a los funcionarios. "Te piden subir una cuerda de seis metros en nueve segundos, pero luego eso no se exige cuando llevas años contratado", asegura Sierra.
De su misma opinión es el director general de Emergencias, que además admite que las pruebas actuales impiden la entrada de mujeres en el cuerpo. "Pero es que en general las pruebas no obedecen a las necesidades reales del servicio", matiza.
Por eso, el Ayuntamiento trabaja ya en la modificación de las bases de la convocatoria a las oposiciones, que esperan tener listas en unos meses, "sin tener que establecer pruebas específicas para las mujeres, ni ponderar a la baja sus puntuaciones", según Del Álamo. Las pruebas actuales potencian la fuerza y la intención de su departamento es resaltar la capacidad de resistencia y las aptitudes para desempeñar las actividades en las que realmente consiste el trabajo de bombero.
Componente táctico
"Vamos a dar más importancia a la capacidad de resistencia anaeróbica, frente a la aeróbica, como ocurre ahora", agregó. También será muy importante el "componente táctico". Es decir, el opositor a bombero deberá superar un circuito con pruebas orientadas a las necesidades de destreza o habilidad que exige el día a día. En la actualidad los exámenes combinan pruebas teóricas con otras físicas. Estas últimas incluyen pruebas como la carrera de 100 metros, con una marca mínima de 12 segundos; carrera de 1.000 metros, con 3,05 minutos, etcétera; levantamiento de peso, con una carga de 40 kilos; flexiones, banco sueco o salto de altura, entre otros.
Pero, además de que la puntuación se hace en función de la marca más alta obtenida de entre todos los participantes, hay otros requisitos, como que las marcas de atletismo se suman, de tal forma que uno puede tener la puntuación máxima al subir una cuerda y estar aprobado, pero suspender porque en total no alcanza el mínimo de atletismo. "Eso te obliga a ir al máximo siempre", dijo Sierra.
En la Comunidad las pruebas físicas exigen unas marcas mínimas para todos los candidatos, según explicó el jefe del Cuerpo, Javier Sanz. Luego las mujeres reciben también una bonificación del 20% de los puntos que saquen al final de todas las pruebas. De tal forma que no pueden entrar si no llegan al mínimo, pero se les exige una marca menor que a sus compañeros. Según Sanz, las pruebas donde peores calificaciones obtienen son las de subir la cuerda y levantar peso.
Los grupos municipales de la oposición, PSOE e IU, reclamaron ayer al alcalde, Alberto Ruiz-Gallardón, un esfuerzo para cambiar el sistema cuanto antes. La portavoz socialista Trinidad Jiménez aseguró que se da la oportunidad política para crear las condiciones que faciliten el acceso de la mujer: "Cuando estamos trabajando para conseguir más igualdad entre hombres y mujeres para acabar con la discriminación, especialmente la laboral, es evidente que no podemos permitir esta situación en la que en un servicio público y de referencia para los ciudadanos no haya una sola mujer. Algo está pasando".
También la portavoz de IU, Inés Sabanés, se mostró en contra. "Hemos reivindicado desde hace tiempo que con el actual modelo es imposible que entren mujeres, y eso es discriminatorio", manifestó. "No tiene explicación ni sentido que no haya mujeres entre los bomberos del Ayuntamiento".
Sólo seis en toda la región
Seis mujeres trabajan como bomberas en la Comunidad de Madrid y entre ellas hay dos oficiales. La plantilla de la región -que no opera en la capital, ni en Leganés, Fuenlabrada y Móstoles, y que tiene sus propios servicios de extinción de incendios- asciende a 1.300 personas, según un portavoz de los bomberos de la Comunidad de Madrid.
De las dos oficiales, una es Pilar Hernández, que ejerce como jefa de Protección Civil de Madrid y que en la actualidad está de "baja por prematernidad".
También hay una conductora, y las demás están empleadas en los parques de Las Rozas, San Martín de Valdeiglesias, Collado-Villalba y Parla.
Entre ellas permanece en ejercicio la primera mujer que consiguió un puesto como bombera en el cuerpo de la Comunidad de Madrid. Se trata de María Jesús Roa Alonso, Mara, que aprobó la oposición en 1990, cuando contaba 26 años, en una convocatoria a la que se presentaron 1.500 personas de entre 18 y 30 años para 74 plazas. Ese año también optaron a ellas otras tres mujeres. Ella es la única de las seis bomberas que, además, es hija de bombero.
EL PAÍS lleva solicitando reiteradamente, desde mediados de enero, a los bomberos de la Comunidad de Madrid una entrevista con estas seis mujeres para conocer de cerca cómo es su labor diaria. Pero todas las mujeres del cuerpo rechazaron la oferta, pues no quieren resaltar su trabajo respecto al que ejercen sus compañeros.
"Las bomberas realizan exactamente la misma labor que los hombres", afirma Javier Sanz, jefe de bomberos de la Comunidad. "No hay diferencias y ocupan los mismos puestos, sean conductoras, punta de lanza o estén en bomba. Son un compañero más", agregó.
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