Cautela en las bases católicas, alivio entre los gays

El triunfo de Ricardo Blázquez suscitó ayer variadas reacciones en asociaciones aconfesionales y grupos católicos socialmente influyentes.

- Somos Iglesia. La corriente crítica de base Somos Iglesia se mostró escéptica y cautelosa. "Esperamos que mejore el diálogo y que haya un talante diferente, pero no prevemos un cambio radical respecto a Rouco", dijo Raquel Mallavibarrena, portavoz del colectivo, que reconoció que no depositan "grandes esperanzas en el nombramiento", dada la actitud de Blázquez en la diócesis de Bilbao hacia Somos Iglesia, y recalcó: "Los problemas de fondo continuarán probablemente".

- Miret Magdalena. Enrique Miret Magdalena, que ha presidido durante años la progresista Asociación de Teólogos Juan XXIII, señaló que "la mala noticia hubiera sido la elección de Cañizares, persona superconservadora". Miret apuntó que "es posible un nuevo clima mejor que con Rouco", y elogió la "moderación" de Blázquez en una "difícil" diócesis, aunque destacó que "no es progresista". El teólogo confió en que la Iglesia esté ahora "dispuesta a dialogar con todos los Gobiernos y no sólo con algunos".

- Gays. La presidenta de la Federación Estatal de Gays, Lesbianas y Transexuales (FELGT), Beatriz Gimeno, se felicitó del relevo de Antonio María Rouco y pidió a Blázquez "diálogo y respeto". "Rouco ha sido tan negativo que es difícil imaginar que pueda ser peor la nueva dirección de la Conferencia Episcopal", dijo Gimeno. "El mandato de Rouco ha sido tremendamente negativo para nuestros derechos, sus actitudes han inspirado la política del PP, los obispos han pasado, muchas veces, de la crítica legítima al insulto hacia lesbianas, gays, transexuales y bisexuales", afirmó.