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Euskadi tramita 2.366 peticiones de regularización en el primer mes

Las ONG critican la excesiva "rigidez" con que se está tramitando el proceso

Las oficinas de regularización del País Vasco han recibido un total de 2.366 solicitudes de inmigrantes con contrato de trabajo desde que el pasado 7 de febrero se inició el proceso de normalización de trabajadores extranjeros. La gran mayoría corresponden a personas que trabajan en el servicio doméstico y la construcción. Las ONG que apoyan la integración de los inmigrantes criticaron ayer las dificultades que encuentran los extranjeros para regularizar su situación laboral y denunciaron el excesivo protagonismo que se ha dado en el proceso a los empresarios.

El balance del primer mes del proceso de regularización abierto el pasado 7 de febrero por el Ministerio de Trabajo y Asuntos Sociales arroja en Euskadi una media de casi un centenar de solicitudes diarias. Las cuatro oficinas abiertas -dos en Bilbao, una en San Sebastián y la restante en Vitoria- por la Administración central para atender a los empresarios habían recibido hasta ayer un total de 2.366 expedientes de regularización, según los datos facilitados por las subdelegaciones del Gobierno en la comunidad autónoma. El periodo para regularizar inmigrantes finaliza el próximo 7 de mayo.

En Vizcaya se han registrado un total de 1.442 solicitudes, de las que la gran mayoría han sido presentadas por los patronos. Además, se han despachado un total de 5.059 consultas sobre el proceso de normalización. En el total de expedientes predominan las documentaciones presentadas para regularizar a ciudadanos colombianos, ecuatorianos y rumanos. Son mayoría los expedientes de trabajadores de la construcción y del servicio doméstico, informa Alberto Uriona.

Guipúzcoa es la segunda provincia con el mayor número de peticiones admitidas. Son 659 en total, de las que 324 pertenecen a ecuatorianos, 115 a colombianos, 43 a marroquíes, 33 a paquistaníes, y el resto a otras nacionalidades. En este territorio, el 50,6% corresponde a empleados del hogar, el 13,6% a empleados en la hostelería y el 12,1% a obreros de la construcción. En el Instituto Social de la Marina, en Trintxerpe, se atiende diariamente a unas 53 personas. La Subdelegación del Gobierno en Guipúzcoa aseguró ayer que 134 expedientes ya han sido resueltos favorablemente. En Álava se han tramitado 265 expedientes.

Ralentización del proceso

La coordinadora de ONG de Euskadi de apoyo a inmigrantes, Harresiak Apurtuz, criticó ayer que el proceso de normalización adolece de una excesiva "rigidez", por lo que muchas personas interesadas en regularizar su situación no podrán conseguirlo. La presidenta de este colectivo, Celina Pereda, criticó que los inmigrantes deben presentar un certificado de empadronamiento -con una antigüedad de seis meses-, del que muchos carecen. Aseguró que este requisito "se tarda en expedir más de 20 días", de ahí que el proceso "se está ralentizando" y "muchas personas no van a poder acceder a la normalización".

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Los representantes de Harresiak Apurtuz, entidad que agrupa a 36 organizaciones, denunciaron que el proceso abierto por la Administración "convierte al empresario en la persona responsable del mismo" y criticaron que los patronos han recibido "informaciones contradictorias de los responsables pólíticos". En una conferencia de prensa celebrada en Bilbao, censuraron "la falta de información, la confusión generada y los criterios cambiantes por parte de la Administración", lo que, a su juicio, demuestra "una ausencia de voluntad política real de regularizar a los inmigrantes".

El presidente del Comité Español de Ayuda al Refugiado (CEAR) en Euskadi, Javier Galparsoro, alertó de que "las expectativas del proceso de normalización no se están cumpliendo", dado que "el subdelegado del Gobierno dijo que en Vizcaya había 18.000 personas potencialmente regularizables". Respecto a esa cifra, en el primer mes del proceso solamente se ha cubierto el 13,1% de las previsiones.

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