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Educación y Ciencia anuncia que incentivará la contratación estable de 300 científicos al año

Financiar durante lo que queda de legislatura al menos 300 plazas o contratos nuevos cada año para científicos en situación precaria es el objetivo que se ha fijado el Ministerio de Educación y Ciencia en un programa nuevo que incluye a las universidades y otros centros de investigación y tecnológicos dependientes de las Comunidades Autónomas, y a los Organismos Públicos de Investigación (OPIS). Cada ayuda tendrá una duración de tres años. "Se trata de fomentar la estabilidad de profesores investigadores en el sistema", dijo ayer la ministra de Educación y Ciencia, María Jesús San Segundo, sobre el programa que se presenta hoy oficialmente a las comunidades autónomas. Esta incentivación va dirigida principal pero no exclusivamente a integrar a parte de los más de 2.000 contratados desde el 2001 en el programa Ramón y Cajal, de los cuales los 800 primeros terminan dentro de 22 meses, aunque algunos ya no están en el programa.

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Dada la complejidad del sistema español de ciencia y tecnología, en el que los agentes que administran los puestos de trabajo son muy variados y tienen mucha autonomía, el ministerio ha optado por un enfoque complejo, que favorece la coordinación e implica que cada agente (por ejemplo, cada comunidad autónoma) pida la financiación durante los tres primeros años de plazas o contratos para científicos con nombre y apellido. Se entiende que los contratos serán indefinidos y será el contratador el que se haga cargo del gasto a partir del cuarto año. El número de ayudas dependerá, pues, no sólo del ministerio sino también de las posibilidades de absorción que muestre el sistema.

Los seleccionados tendrán que cumplir unos baremos de carrera investigadora y de excelencia fijados por el ministerio. Tendrán que tener al menos seis años de experiencia posdoctoral y haber trabajado en instituciones distintas a la cual se incorporarían. La distribución por comunidades autónomas de las ayudas también tendrá unas cuotas, todavía por fijar. Se podrán ocupar plazas de nueva creación y también plazas vacantes.

En el caso del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) y los demás OPIS, sólo se podrán financiar contratos, mientras no cambie su estructura jurídica, según fuentes ministeriales. Cada ayuda de tres años supondrá para el ministerio un gasto de 130.000 euros, que se extraerán de los fondos destinados a subvenciones. En años posteriores se pretende combinar este programa con otros dos, con el objetivo de incorporar científicos que estén en el extranjero y favorecer la dedicación intensiva a la investigación.

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