_
_
_
_
Crítica:COMER
Crítica
Género de opinión que describe, elogia o censura, en todo o en parte, una obra cultural o de entretenimiento. Siempre debe escribirla un experto en la materia

Reconfortante simplicidad en la Cava Baja

ORIXE, un nuevo y moderno restaurante gallego en el centro de Madrid

José Carlos Capel

Ni su elegante fachada, de fusión y diseño, ni su apacible ambientación interior ayudan a descubrir que se trata de un restaurante gallego. En plena Cava Baja madrileña, muy cerca del popular Lucio, rodeado de bares y locales castizos, acaba de abrir sus puertas este atractivo restaurante a medio camino entre una casa de comidas contemporánea y un bar de tapas moderno. No es frecuente que un grupo de profesionales independientes unidos por su afición a la cocina, Eloy Sánchez, Rogelio Cañas y José Antonio Baselga, entre otros, se planteen un restaurante como diversión a la vez que como fórmula de negocio. De ahí algunos detalles de sensibilidad inusuales y esa obsesión por ofrecer platos sencillos y ligeros que pasan por el filtro gastronómico del colectivo.

Orixe

Cava Baja, 17. Madrid.

Teléfono 913 54 04 11.

Cierra domingos noche y lunes.

Precio aproximado por persona: entre 30 y 40 euros. Empanada de bonito, 11,75 euros. Bacalao de los mercantes gallegos, 18. Lacón con grelos, 12,75. Leche frita, 4,75 euros.

Pan ... 5

Café ... 6,5

Bodega ... 6,5

Servicio ... 6

Ambiente ... 7

Aseos ... 6,5

Benedicto Borbolla, cocinero asturiano, elabora recetas galaicas en las que se permite tímidas digresiones creativas. Es magnífica la empanada de bacalao y pasas, así como la de bonito; correcto el pulpo a feira, y bastante resultonas las croquetas de lacón y grelos, que alcanzarían el notable si su sabor fuera más intenso. No desmerece la tortilla de patatas, aunque para su elaboración no se sigan los dictados de la famosa escuela de Betanzos (A Coruña); es bastante suave el pastel de grelos, mientras que las filloas rellenas de lacón, carentes de gracia, desmerecen del resto. Todo dentro de esa reconfortante simplicidad que caracteriza a la cocina popular gallega, que, como afirma Juan Mari Arzak, gracias a su sencillez y voluntad de respeto al producto, enfila la modernidad sin haberse movido de su propio sitio.

En los platos de más entidad, el balance es variopinto. Resulta algo desangelada la ensalada de vieiras con cebolla caramelizada; sorprende favorablemente el rodaballo con setas al ribeiro; mientras que la merluza al horno, bastante buena, se perjudica con una panadera de manzana con la que no liga nada. ¿Fruta con pescado? Desajustes inevitables en una carta bastante emocional cuya puesta a punto se pulirá -cabe esperar- a medida que transcurra el periodo de rodaje.

En la pieza de lacón con grelos se echa en falta un sabor más intenso. En cambio, los callos con garbanzos se aproximan bastante a la fórmula popular gallega. Quien incurre en despistes reiterados es el personal de servicio, voluntarioso, pero todavía fuera de su sitio.

Comedor del restaurante Orixe, situado en la Cava Baja de Madrid. Abajo, bacalao de los mercantes gallegos.
Comedor del restaurante Orixe, situado en la Cava Baja de Madrid. Abajo, bacalao de los mercantes gallegos.SANTI BURGOS

CLARIDAD DE IDEAS

LA MAGNÍFICA remodelación de Orixe responde a un proyecto del arquitecto Justo Trapa, que ha respetado los elementos más valiosos del local (paredes de ladrillo visto, columnas de hierro) para revestirlo de modernidad con enorme claridad de ideas. A ras de calle se encuentra la barra, un espacio recoleto en el que es posible disfrutar de tapas variadas: pimientos fritos de Padrón; tortilla de patatas; tostadas de lacón con queso de tetilla; empanada del día; croquetas; callos con garbanzos o chorizos al albariño, entre otras especialidades. Si se desea, las mismas tapas se pueden degustar en sus mesas. Hasta tal punto, que lo más recomendable es desmarcarse de la carta y solicitar un surtido de raciones. A diario se ofrece siempre un guiso de cuchara. Es suculento el arroz caldoso con pulpo de los lunes; decepcionante el potaje de alubias blancas con chorizo de los martes, cuyas legumbres llegan enteras y con abundante hollejo, y sólo agradable el pollo con fideos, plato de los jueves. Otras sugerencias son las patatas guisadas con calamares (viernes) y las albóndigas de ternera gallega con patatas (sábados).Donde Orixe debe esforzarse por mejorar es en el capítulo dulce. Tienen dignidad la tarta fina de manzana, la tarta tatín y las filloas variadas. No se puede decir lo mismo de la leche frita, muy reseca, ni de las cañas de Carballiño, anodinas. En la bodega, acaparada por los vinos gallegos, se aprecia un esfuerzo por aunar diversidad con tradición y vanguardia. En el listado hay un poco de todo a precios razonables.

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Sobre la firma

José Carlos Capel
Economista. Crítico de EL PAÍS desde hace 34 años. Miembro de la Real Academia de Gastronomía y de varias cofradías gastronómicas españolas y europeas, incluida la de Gastrónomos Pobres. Fundador en 2003 del congreso de alta cocina Madrid Fusión. Tiene publicados 45 libros de literatura gastronómica. Cocina por afición, sobre todo los desayunos.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_