El retorno a la figuración de un maestro
La exposición que se abre hoy en el museo Tate de Londres dedicada a Anthony Caro refleja el afán por descubrir la verdad de una pieza, tanto en su propio seno como en el contexto espacial, que marca el lenguaje expresivo de este artista que en vísperas de cumplir 81 años se niega a relajar la guardia.
La Tate Britain presenta en su retrospectiva de Anthony Caro una instalación de gran impacto emocional. Se trata de la serie de esculturas titulada The last judgment (El juicio final), creada entre 1995 y 1999, en la que el escultor retorna a la figuración sin abandonar completamente la abstracción. En ellas combina elementos figurativos humanos con piezas puramente abstractas en una reflexión en torno a la coyuntura mundial. La exposición temporal de la institución británica es gratuita, algo inusual.
'Collage'
Mediante un collage de materiales -madera, hierro, terracota- crea composiciones que traen a la memoria capítulos lúgubres que creíamos erradicados en la sociedad contemporánea europea: la guerra, la limpieza étnica, la tortura, las agresiones en la dignidad humana. Se accede al conjunto a través de un muro de ladrillos y un portalón que presagia un capítulo de malas noticias.
The last judgment parece enlazar con una serie de esculturas que Caro construyó en los dos últimos años. Titulada genéricamente Witness (Testigo), con piezas individuales en las que también resalta la figura humana en actitudes de sufrimiento, no forma parte de la retrospectiva de la sede original del museo Tate, en la orilla norte del Támesis. Algunas de las obras de este conjunto escultórico, de gran carga emocional, sí viajarán, en cambio, a Valencia para el homenaje que el IVAM prepara a este excepcional maestro escultor, que se realizará entre el 2 de junio y el 11 de septiembre.
Babelia
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.