Ecuador trata de aliviar las colas de inmigrantes suprimiento un trámite

Los gobiernos de España y de Ecuador han alcanzado un acuerdo que busca aliviar los trámites burocráticos a que se ven sometidos los inmigrantes ecuatorianos sin papeles para obtener el certificado de antecedentes penales, imprescindible para que los empresarios puedan regularizar su situación. Las autoridades de Quito han accedido a eliminar el último sello consular sobre el documento, por el que han venido cobrando hasta ahora 50 euros a cada inmigrante.

Miles de ecuatorianos en situación administrativa irregular hacen colas de hasta varios días ante sus consulados en España para obtener un poder que deben remitir a sus familiares en Quito. Con dicho poder, los familiares acuden al Archivo Central de la Policía de Ecuador, donde la fila de personas interesadas da tres veces la vuelta al edificio, según Efe, para lograr el certificado de antecedentes penales. Con éste bajo el brazo, deben ir a legalizarlo en el Ministerio de Relaciones Exteriores. Luego lo envían a sus familiares en España. Por cada uno de estos pasos pagan las tasas correspondientes.

Una vez que los inmigrantes recibían el documento, debían volver a hacer cola ante sus consulados en España para sellarlos. Éste es el trámite que ha sido suprimido. A partir de ahora será el Ministerio de Asuntos Exteriores español, de acuerdo con su equivalente ecuatoriano, el que visará los certificados, después de que los empresarios los hayan entregado con el resto de la documentación para regularizar a los inmigrantes.

Durante los últimos días, la secretaria de Estado de Inmigración y Emigración, Consuelo Rumí, había hecho llegar al embajador de Ecuador en España, Fernando Carrión, su preocupación por las largas colas que tenían que soportar los ecuatorianos ante sus consulados. El departamento de Rumí ofreció a la Embajada varias fórmulas para agilizar la burocracia. Entre ellas, la que se ha elegido finalmente.

Dado que, según los cálculos del embajador Carrión, unos 200.000 ecuatorianos optarán a la regularización, la representación diplomática dejará de ingresar en torno a un millón de euros por la eliminación del último trámite consular.