Artistas de la cultura digital proponen comunicar una nueva lectura del mundo
El Conde Duque ofrece en 'Banquete' una exposición y un simposio sobre arte y ciencia
"Es el arte del siglo XXI, sensible al desarrollo tecnológico y crítico con la distorsión de la comunicación". Así presentaron ayer Karen Ohlenschläger y Luis Rico, directores de MediaLabMadrid (www.medialabmadrid.org), programa del Centro Cultural Conde Duque, de Madrid (Conde Duque, 11), y comisarios de la exposición Banquete-comunicación en evolución (www.banquete.org). La muestra de una treintena de propuestas últimas de arte digital y un simposio de artistas y científicos ofrecen una nueva visión del mundo en la que se unen el arte y la ciencia.
El arte electrónico se contamina de códigos, lenguajes, tecnologías y dinámicas sociales. El Conde Duque se convierte hasta el 20 de febrero en un laboratorio donde dialogan la ciencia, el arte, la tecnología y la sociedad, con las propuestas de artistas como Eduardo Kac, pionero del arte transgénico; Golan Levin y Benjamin Fry, figuras del software art; las esculturas robotizadas de Ken Rinaldot, la ingravidez de la utopía de Marcel·li Antúnez y los nuevos usos sociales de la comunicación de Manuela Moscoso y Antoni Abad.
La segunda edición de Banquete-comunicación en evolución pretende relacionar el arte digital con las nuevas tecnologías y "romper los límites de disciplinas y conocimientos para conocer el mundo que nos rodea", según Juan José Echeverría, director general de Patrimonio Cultural del Área de Gobierno de las Artes, del Ayuntamiento de Madrid. Para el director del Conde Duque, Juan Carrete, el centro es un lugar para la cultura digital y Banquete es el modelo, como un lugar de encuentro y de reflexión.
Karin Ohlenschläger y Luis Rico identifican Banquete con los diálogos de conocimientos y saberes distintos, para intercambiar metodologías, conceptos, ideas y miradas. "Faltan conexiones entre los campos de conocimientos y que se compartan entre artistas y pensadores. Pensar las ciencias como artes y las artes como ciencias".
En el simposio internacional, que se celebra desde hoy hasta el viernes, participan artistas, biólogos, matemáticos, activistas, neurocientíficos y lingüistas. Junto a los artistas dialogarán científicos como Lynn Margulis y Peter Westbroek, sociólogos como Derrick de Kerckhove y activistas como Vandana Shiva.
Los organizadores ofrecen una nueva mirada del mundo, formado por una biosfera y una infosfera, "una red de redes donde se cruzan infinidad de signos, códigos y lenguajes materiales y simbólicos". Ohlenschläger y Rico opinan que "los emergentes proyectos artísticos generan nuevos espacios de comunicación y circulan por las redes telemáticas y participan en la construcción social de la realidad". Añaden que el medio vital y las prácticas artísticas se han transformado por la microelectrónica, las neurociencias, la sociología o las matemáticas.
Los directores del proyecto Banquete han distribuido instalaciones multimedia e interactivas, esculturas robóticas, arte genético, activismo on line o arte en la red en cuatro espacios que agrupan temas concretos. Distorsiones en torno a la transformación y manipulación de la información, con propuestas de Jodi, Michal Rovner, Franz John, Esther Mera, Tony Bellaver y otros; Biosfera-infosfera relaciona biosistemas e infosistemas, redes telemáticas, diseño de interfaces, como en los trabajos de Ursula Damm, Eduardo Kac, Evru, Mariela Cáliz, Benjamin Fry y Yunchul Kim. Otras salas se dedican a las interferencias productivas, con las relaciones entre los sistemas sociales, biológicos y culturales, como proponen Manuela Moscoso, Santiago Ortiz, Marta de Menezes, Ken Rinaldo, Marcel·li, Levin y Lieberman, y En construcción, sobre la manera de articular redes de comunicación, como los proyectos de La Fiambrera Obrera, Antoni Abad, Creative Commons, Platoniq, Javier Abarca, Mika y Tatsuo y Dora García, entre otros.
El visitante podrá seguir las arquitecturas volátiles de enjambres de mosquitos y la descomposición de la versión digital del Quijote, sentir la actividad sísmica del planeta, ver un cultivo de ciudadanos, las voces en imágenes y las imágenes subliminales de un anuncio, asistir en una guardería a la visión de árboles y a la destrucción y creación de un cuerpo, participar de mundos virtuales y entornos reales (www.zexe.net/gitano) y comprobar cómo peces luchadores mueven robots.
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