El SAS revisa su nuevo programa informático tras detectar problemas

Técnicos informáticos de la empresa Indra revisaron ayer las instalaciones de los centros de salud andaluces donde la puesta en marcha del nuevo programa informático Diraya, con el que el Servicio Andaluz de Salud (SAS) pretende modernizar las prestaciones a los pacientes y profesionales, está provocando problemas al ralentizar, en algunos casos, el sistema de cita previa y provocar cortes puntuales con el servidor principal de información. Los incidentes más destacados han ocurrido en Puerto Real (Cádiz), donde se produjeron agresiones físicas a trabajadores a causa de las largas esperas.

El sistema Diraya comenzó a implantarse el pasado año. Permitirá disponer del historial y registros clínicos de los pacientes en soporte digital. Una vez desarrollado en toda Andalucía, posibilitará, mediante el uso de la tarjeta sanitaria, tener acceso a los datos del usuario en cada momento en cualquier punto del sistema sanitario público andaluz. Sin embargo, los primeros días de puesta en marcha de esta innovación está causando dificultades. Según explicaron fuentes del SAS, "la migración de datos a esta novedosa aplicación tecnológica requiere un corto período de adaptación", que es lo que está provocando retrasos en la atención.

Retrasos y agresiones

Dos de los centros más afectados están en la provincia de Cádiz, en Puerto Real y en Chiclana. En ambos, según reconoce la Junta, se han originado aglomeraciones y largas esperas. Una denuncia que han concretado los sindicatos. UGT aseguró ayer que "la mala programación de la implantación, con continuos cortes en el sistema informático, están provocando deficiencias que retrasan la obtención de citas".

Estas colas han terminado con la paciencia de algunos usuarios. El pasado 12 de enero fueron agredidos físicamente por personas que esperaban ser atendidos dos trabajadores del centro, un celador y una auxiliar administrativa. El representantes de UGT, Luis Moro, sostiene que la lentitud del nuevo programa informático "no ha hecho más que empeorar la masificación" de un centro que atiende a una población de 47.000 habitantes.

La Junta, aunque reconoce los fallos y pide disculpas por ellos, considera "injustificables" las agresiones. Aclara también que los problemas han surgido en "un número reducido de centros" y que en éstos ya se ha comenzado a trabajarse para solucionarlos.

Durante el día de ayer, técnicos informáticos comenzaron a aplicar mejoras en el cableado y en los equipos instalados en Puerto Real y Chiclana con el fin de corregir las dificultades técnicas.