Guipúzcoa lanza un programa para fomentar la inteligencia emocional en la educación

La Diputación de Guipúzcoa ha puesto en marcha un proyecto piloto para fomentar la inteligencia emocional en el ámbito educativo. Con este fin ha organizado un programa de once cursos para los directores y profesores de todos los niveles y áreas, desde primaria hasta Formación Profesional y universidad, en el que ya se han matriculado 320 personas.

La inteligencia emocional es la capacidad de sentir, entender, controlar y modificar estados anímicos propios y ajenos, según la definición de quienes acuñaron el término a principios de los noventa, los psicólogos de la Universidad estadounidense de Yale Peter Salovey y John Mayer. La inteligencia emocional se traduce en competencias prácticas como la destreza para saber qué pasa en el propio cuerpo y qué sentimos, el control emocional y el talento de motivarse y motivar a los demás, además de la empatía y las habilidades sociales.

Los cursos servirán para el propio desarrollo emocional de los profesores, quienes, a su vez, transmitirán los conocimientos adquiridos a los alumnos. "Es una apuesta a largo plazo", subrayó ayer el diputado para la Innovación, Joaquín Villa, quien apuntó que lo ideal sería que en un futuro esta formación la asumiera el Departamento de Educación.

Si esta experiencia piloto da buenos resultados, la Diputación ampliará la oferta en el área de educación y la trasladará también a los ámbitos empresarial, social y familiar. Y es que, en el cociente de éxito, el 23% se debe a las capacidades intelectuales y el 77%, a las actitudes emocionales, según un estudio al que hizo referencia Villa.