La victoria de Abbas se proclama sin datos de participación

La Comisión Electoral Central proclamó ayer oficialmente a Mahmud Abbas, alias Abu Mazen, vencedor de las elecciones presidenciales celebradas el pasado domingo en los territorios palestinos de Cisjordania, Gaza y Jerusalén con el 62,52% de los votos. A pesar de que el comunicado oficial no revela el índice de participación, lo que fomenta una guerra de cifras y la polémica, el nuevo presidente jurará su cargo el sábado en una ceremonia en Ramala.

La proclamación oficial de la victoria del candidato oficialista, Mahmud Abbas, se llevó a término en un acto cerrado celebrado en la sede de la Comisión Electoral Central de Ramala, a la que asistieron los líderes políticos más destacados, así como los siete aspirantes en liza. Minutos más tarde, la Comisión Electoral difundió una nota informativa, dando por cerrado el procedimiento electoral y las operaciones de recuento.

Poco antes del anuncio oficial, el Tribunal de Recursos de las Elecciones Palestinas había rechazado de manera global una ola de reclamaciones presentadas por los candidatos y votantes, la mayoría de las cuales hacían referencia a la decisión del Comité Electoral de prolongar por dos horas los comicios y permitir al mismo tiempo a los votantes depositar su papeleta en las urnas sin necesidad de estar inscritos previamente en las listas electorales, con el único requisito de demostrar que estaban inscritos en el Registro Civil.

Estas últimas decisiones electorales, adoptadas de manera precipitada después de que las autoridades constataran un moderado índice de participación, abrió las puertas al fraude, posibilitando que algunos ciudadanos votaran dos veces y que los militantes de Al Fatah se movilizaran arrastrando hasta las urnas a nuevos electores. La operación favoreció al candidato oficial, pero creó un caos por el cual las autoridades se ven incapaces de establecer el índice de votantes, por haberse utilizado a la vez dos censos: el electoral y el civil.

Esta operación de ingeniería electoral de dudosa legalidad hace más difícil contabilizar la participación. Si el cuerpo electoral palestino lo configuran los electores previamente inscritos, el índice es del 66%, que oficiosamente las autoridades dan como válido. Pero si se utiliza como cuerpo electoral el Registro Civil, el índice de votantes de las elecciones fue sólo del 43%, lo que supone que Abbas únicamente tiene el apoyo del 26% del electorado. La polémica no invalida la votación ni deslegitima a Abbas, pero lastra su victoria, sobre todo a ojos de los palestinos y a pesar de la euforia de la comunidad internacional, especialmente de EE UU, la UE e Israel.

En medio de la polémica y la guerra de cifras, los movimientos radicales palestinos lanzaron ayer una ofensiva contra los israelíes, en el sur de la franja de Gaza, y mataron a un colono e hirieron a tres soldados. Se trataba de la primera operación de los radicales tras los comicios. La operación fue reivindicada por el movimiento fundamentalista Yihad Islámica, que había logrado introducir un comando en un asentamiento de Morag, donde colocaron una bomba que explotó al paso de un vehículo militar.

Gideon Rivlin, de 50 años, funcionario de la federación de asentamientos de Gaza, casado y padre de cinco hijos, se ha convertido así en la primera víctima israelí de la era Abu Mazen, aseguraban ayer fuentes israelíes. En el momento del ataque inspeccionaba las verjas del asentamiento de Morag,donde viven 170 colonos.