Dos antiguos espías demandan a la CIA por retirarles su sueldo

El caso se conoce como Tenet vs. Doe, 03-1395. Se trata de dos antiguos espías, conocidos bajo el alias John Doe y su esposa Jane, que trabajaron para los servicios secretos de Estados Unidos durante la guerra fría y que denuncian a la CIA por retirarles el sueldo que habían pactado de por vida. La historia puede parecer banal pero, según la Casa Blanca, podría poner en riesgo la seguridad nacional si el litigio es resuelto finalmente por el Tribunal Supremo.

De la pareja sólo se conoce que eran antiguos diplomáticos de un país del antiguo bloque Soviético y que fueron presionados por EE UU para que actuaran como sus espías a cambio de ayuda. En 1987 terminó su misión y se establecieron en Seattle con una nueva entidad, un trabajo y una paga. John se quedó sin empleo diez años después sin que la CIA le ofreciera una alternativa.

La pareja pide ahora una revisión judicial del contrato, alegando que la agencia rompió la promesa por la que les garantizaría seguridad financiera de por vida. Pero el Ejecutivo de George W. Bush quiere evitar que el caso siga adelante y reitera en su defensa que el Tribunal Supremo no tiene capacidad para decidir sobre la materia.

La Casa Blanca utiliza como argumento que desde que la CIA fue creada, en 1947, existe una regla tácita por la que los tribunales deben negar automáticamente este tipo de denuncias porque los contratos con los espías son "secretos" y, por tanto, no deben ser conocidos. Además, se remite a los eventos del 11-S para alertar de los riesgos para la seguridad nacional de EE UU.

Pero el abogado de la pareja de espías responden que "este caso no es sobre la protección de los secretos del Estado sino sobre los límites en el ejercicio del poder". El Supremo tiene previsto adoptar a final de junio una decisión sobre el caso, después de que el martes escuchara los argumentos de las partes.