Alltel compra Western Wireless y crea la quinta compañía de móviles de EE UU

Las grandes compañías de telecomunicaciones se fusionan y las pequeñas hacen lo propio para sobrevivir. Alltel, el sexto operador de telefonía móvil en Estados Unidos, anunció ayer la adquisición de Western Wireless por 4.420 millones de dólares (3.390 millones de euros). Además, asumirá una deuda de 1.500 millones. La nueva entidad contará con 9,8 millones de clientes, con lo que se convertirá en la quinta operadora del país, y tendrá una cifra de negocio de 10.000 millones de dólares.

Alltel puso sobre la mesa una prima del 7,5% por acción sobre el precio de cierre de Western el pasado viernes para poner fin a los rumores y reforzar su presencia en el oeste de EE UU, donde ya domina en el mercado rural. La operación se realizará a través de un intercambio de acciones -aproximadamente 60 millones de títulos- y de un pago en efectivo de entorno a 1.000 millones de dólares. Así, Alltel conseguirá 1,9 millones de nuevos abonados y 1,6 millones de clientes internacionales en seis países.

"Esta operación refuerza nuestra posición como una de las principales compañías regionales en EE UU", señaló el presidente ejecutivo de Allel, Scott Ford, quién auguró que éste será el último matrimonio empresarial en el sector de la telefonía inalámbrica en EE UU, que desde hace un año está sumido en un frenético proceso de consolidación. "La nueva compañía podrá competir así con los grandes operadores de telefonía móvil", señaló Ford.

Alltel espera tener concluida la operación para mediados de este año, cuando supere el examen de las autoridades reguladoras del mercado de las telecomunicaciones en EE UU.

La compañía Cingular cerró en octubre pasado la compra de AT&T Wireless por 41.300 millones de dólares, convirtiéndose en el número uno del sector por delante de Verizon Wireless. Sprint, por su parte, anunció en diciembre la adquisición de Nextel Communications por 35.000 millones, para reforzar su tercer lugar en el mercado estadounidense.